Un beso
es el silencio
haciéndose dueño de sí.
La ausencia acariciada
es la poesía
sonrojándose de existir.
Un paraíso
son las manos
de un sueño
derritiéndose en la idea de frío,
en la forma de un adiós.
Susurrar
es la noche
bebiéndose su propio
vacío recién creado.
Una caricia
es la luna
escondiéndose
en el concepto de nube.
Susurrar un beso
es el viento
devorando su propio
movimiento.
aapayés

