Cuando las piedras hablan
Gritan de remordimiento
Por el castigo eterno del tiempo
Es el alma magullada de la vida
Aniquilada cada vez que soñó ser libre
Ruegole a su desdicha,
Que dicta los desgarradores instintos
Del aliento en la grieta del muro de la vida,
Llore
Cuando las piedras lloran
Se polvorea el alma
Engarrotada en el camino misterioso del silencio
Petrifica la agonía
De quién merece amor sin tentación
Cuando la piedras hablan
Hablarán las grandes avenidas
Con el puño alzado tirando libertades
Cuando las piedras lloran
Enloquece el silencio
De la hormiga solitaria y pálida
De seguir viviendo, coloreando tentaciones
aapayés