Microbiografía de Adolfo Payés

Bertolt Brecht

Bertolt Brecht

viernes, 22 de agosto de 2025

Tú, mi siempre y mi misterio




















Que tu adiós sea como el vaho  
De un jazmín entre la bruma,  
Que en el vientre de la tarde  
Guarde el nido de nuestra lumbre.  

Que en la sombra de las horas,  
Sin voz, sin tiempo, sin nombre,  
Nazca el amor que un día  
-Entre sueños y jirones-
Tejió su canto en nuestro pecho  
Con hilos de sol y espuma.  

Que tu piel, suave memoria,  
Sea brisa en mi costado:  
Que tu beso, dulce herida,  
Florezca en el desvelo,  
Y en el río del olvido  
Su fragancia sea remanso.  

Que en la huella de tus pasos  
Quede un polvo de mi aliento,  
Y en tu cuello, las guirnaldas  
Que trenzó nuestro silencio.  
Que lo eterno sea un instante  
Y lo prohibido, un reflejo  
De dos astros en el agua  
Deshojando su destierro.  

Que tu nombre, leve aroma,  
Me persiga como un verso,  
Y en la sed de mis palabras  
Sea miel, sea fuego, sea cielo.  

Perfume que no se apaga:  
Tú, mi siempre y mi misterio.  
El tiempo ya no es medida,  
Sino tu latido dentro.  

aapayés