No dejo de leer la noche,
Cuando el silencio brilla por las madrugadas
Y las estrellas bailan al compás del viento,
Y tus ojos se derriten de sueño
Esperando volar a ella, a él
La soledad nocturna es cruel, a veces
Suele abrazarte y no soltarte a la vez
Esa tranquilidad de la noche
Me enamora,
Me contagia y me da vida, deseo
La noche me incita a la tentación de un beso
De unas piernas abiertas, a mi
De unos labios humedecidos de pasión
Y con la legua deslizando por doquier, me miras
Abierta tu boca, expresando a gritos tus deseos
La noche es cómplice de mis tentaciones
El silencio me convida a tenerte aquí, en la cama
O frente a mi, que mas da, si estés o no
La noche es mía, la soledad tambien
Un beso
Una noche
Esta noche y sentirás penetrar tu cuerpo, a besos
aapayés