Que la noche
Me invite a soñar
Es un alarido en el silencio
Esa moratoria
Que trasciende el tiempo
Mezclando el deseo
Y el amor escrito en poesía
No tienen parangón
En la distancia
Que la noche
Me invite a soñar
Es un verso escrito
En el espejo del universo
Y en los pantanos de la memoria
Esa memoria en reposo
Que humedece
La esponja del deseo
Que la noche toque mi puerta
Es abrir las tentaciones
De la soledad
Acurrucada en el alma
De la nostalgia
aapayés