Leo la luz que ilumina tus ojos
Y me derrite la idea
De expresar sin sentido
Los versos oscuros de tu alma
Paradigma espiritual de tus vacíos
Arrogancia senil
De un águila en pleno vuelo
Con su presa en sus garras
Te leo
Y me quedo interrogando tu mirada
Ausencia de una caricia
Que trascienda tus deseos
Pasión
Diminuta de un colibrí
A inmediaciones de tus labios
Ya desearía ser la luz
Que ilumina tus ojos,
Como brillan los míos al mirar
Tu ausencia en el exilio
Escribo un poema
Siempre pronunciando tu nombre
Y tú
Ni siquiera te detienes al leerlos
Un abeja
Dejó su aguijón
Mordiendo el alma de mi inspiración
Dejé de escribir
Y los versos se esfumaron por la ventana
Escribo la luz de tus ojos
Y verso iluminando sentimientos
Amarrados a ti siempre
aapayés
