No dejar nada en la camisa
Que abriga la monotonía colosal de la vida.
Un andar desnudo en la mazmorra del destino
Un pasito abierto
Y el otro cerrado a medio andar,
Navegar por los mares de la ciudad
Edificios compactos a la euforia colectiva
Mediocre sintonía con la bohemia,
Una luz pérdida
En el callejón del cobarde amor,
Que desencadenó las dificultades poéticas
Cada frase fornicando el acento equivocado
Dos moralejas desnudas
Acariciando el puterío verbal del cielo
Una novela vacía de orgasmo literarios,
Pero salpicada de historias de femicidios
En los burdeles de la sociedad
Histeria colectiva del crimen organizado,
Al crimen de estado
Prostíbulos a medio andar
Pasos largos en los pensamientos burocráticos,
Un burgués pagando putas y cobrando el salario
De todos los hombres y mujeres honestos,
Un político burgués vendiendo su culo
Al mejor postor del Fondo Monetario Internacional
Y el presidente mamando la verga al Banco Mundial
Dos parábolas acróbatas de la sociedad
Una misma imagen vendiendo todo
Un periodista ofreciendo su dignidad
Por unos cuantos dólares
Tapizando de mierda los periódicos.
Cada mañana yo te quiero mucho mas
aapayés