Microbiografía de Adolfo Payés

Bertolt Brecht

Bertolt Brecht

miércoles, 9 de septiembre de 2015

Me dejé llevar por la noche, día













Desperté apresurado
Gritando nombres que me acompañaron el sueño

Corriendo y sin vestirme el rostro
Tome la camisa en mis manos
La amolde a mi cuerpo,
El pantalón me hizo cosquillas en los testículos
Que saltaron a carcajadas
Al sentir el aroma de mis versos

Llegué al  teatro de Champs-Élysées 
El concierto estaba listo para comenzar 

Busqué mi butaca, me senté religiosamente
A esperar el momento intenso del silencio,
Entre tanta oscuridad y luz tenue
Apareció la silueta de Cortázar
Caminando hacia la butaca continua

Religiosamente nos saludamos
Y en un estirar de brazos
Nos encontramos frente al concierto de Ígor Stravinsky
Junto a Jean Cocteau que declamaría su poesía,
Bajo la dirección del maestro

Cortázar  anonadado,
Queriendo encontrar la explicación de dichos personajes 
Apareció en el escenario imaginario, Cronopio 
Poeta y artista a-social de la vida,
Frente a la imagen imponente de los fama 
Banqueros, oligarcas y presidentes

Junto a las esperanzas 
Individuos que juegan ambivalentes su conducta
Entre los famas y los cronopios 
Y que van a la deriva queriendo encontrarse 
Con nadie, 
Más que con su propio ego de clase media

Me dejé llevar por la noche, día

Que poesía leer a Cortázar y escuchar a Stravinsky
Y sentir los versos de Cocteau

¨ Mais qu’est-ce que j’ai donc ?
Mais qu’est-ce qui m’arrive ?
Je dors. Ne pas dormir m’est dû.
À moins que, si je dors, je n’aille à la dérive
Dans le rêve où je t’ai perdu.¨
                                         Jean Cocteau

Terminado el concierto
Me quedé bebiendo whisky con Cortázar
Y ante la humareda de tanto cigarro, 
Respire profundo

Antes de despertar del sueño
En la oscuridad del día

aapayés