Me quede esperando la mañana,
De pronto:
Las letras en mis labios amordazaron mi pensamiento
No me dejaron escribir las palabras,
Ni la coherencia de mis deseos
Le dije no, a la poesía,
Insistió con sus metáforas
Y con sus versos desnudaron mis pensamientos
Pero,
Hay un párrafo de mi vida que no recuerdo
Los truenos y rayos por las noches
Son eternos
La lluvia, se marchó sin dejar huella
En las lagrimas de mis poemas
Taciturno y huérfano
Las comas, que se presentaron en el libro de mi vida
Se quedaron esperando los puntos suspensivos...
Con los años
Guarde en mis labios,
Tus sonrisas escritas por tu cuerpo enlazado al mio
Y sigo cada mañana inventando
Versos,
No dejo de escribir tu figura
Veo en cada verso de tus labios,
El poema de mis deseos
En cada esquina de tu silueta,
Encuentro la pasión de mi poesía
No he dejado de soñar tus labios,
Ni tu presencia desfilando tentaciones
Tu cuerpo, es la máxima expresión de mis deseos
Y la exquisita pasión de mis locuras escritas y sexuales,
Cada segundo a tu lado
Se transformaron en dimensiones infinitas de amor
Le dije al tiempo
Que no espere el final de nuestros besos
Son eternos,
Porque el calor de tu existencia,
Se asemeja al sol,
Dimensión infinita de luz
No dejo de pensarte
No dejo de sentirte
No dejo de acariciarte
En el día,
Las horas y los minutos
Parpadean los segundos
Anoche deje en tu cuerpo, todo
Llevo en mis labios
Tus secretos mas eróticos del momento,
En mis ojos he dibujado para siempre
Tus movimientos de amor, pasión y placer
Con el ritmo permanente de tus besos
De tus piernas
De tus Manos
De tus cabellos
De tus labios
De tus gestos mas sensuales
Y de tu lengua acariciando mis deseos
Me quede esperando la mañana
aapayés
