La tinta de mis pupilas
No alcanza para escribir,
El oscuro grito de mi sentir
La lectura de mis secretos
Se encuentra a medias en el vivir
Mi testamento está vacío
Acaricia el tiempo
El orificio de la oficina,
La esquina de mi mirar
En el trasfondo de mi inquietud
Letras inconclusas
Féretros obtusos, frío su palpitar
La nadería del testamento
Perecerá por lo que es,
La esencia de la nada, sin censurar
aapayés.