Que elocuente manera
De acariciar mis ojos
Y mis manos coqueteando tu presencia
Imagen perpetua
Con la cámara de tus deseos,
Me desnudas
Te desnudas
Y el brillo obsceno del resplandor,
Me convida a acariciar tus labios
Con la lengua majestuosa
En el secreto céntrico de tus deseos,
Me dejo llevar
Y mi lengua deletrea con lucidez
El clamor de este amor compartido
De ese gesto de tu dedo
Percutando el equilibrio hermoso
De imagen captada en un segundo
Capricho inmaculado de un gesto enamorado
aapayés