Malabares ausentes
Me tocó inventar,
Un pájaro herido guiño su aliento
En la mano de mi locura,
Y sin saber por qué y como,
Me dejé llevar por su aleteo
Acariciando la ausencia espiritual de tus manos
Un beso inesperado
Devoró la poesía de mis manos
Y de mis labios acariciando tu recuerdo
Un beso fresco en el momento preciso de tu ausencia
Resbaló con sentido humano
Una lagrima
Dibujando soledades ciertas del silencio
En el destino usurpador de esperanzas
aapayés
