Me despertó
El ladrido de una oruga
De un sueño sedentario y torpe,
Un rompecabezas
Acariciando soledades
Y me encuentro
Con el sol
Iluminando la librería abandonada
En la esquina de la puerta
Y no supe leer
Las caricias del sol en mis pestañas
Hasta que vi
Desfilar tu silueta desnuda
Entre la oscuridad del día
En la sala intentando ser poesía,
La contraluz de tu belleza
Indudablemente
Es el mejor despertar en la vida
Me despertó
El ladrido de una oruga
Desnudando su alma,
Para ser una mariposa en pleno vuelo
En la habitación de mi silencio
aapayés