Ya no escucho el canto de las aves
Que alborotaban la vida
De esperanza,
El sonido que trasciende
Es el silencio
De un amor en decadencia,
Las caricias se quedaron mudas
Los besos, ciegos
Y la ternura sin sentimientos
Un algoritmo de ilusiones perdidas
En tanta espiritualidad imaginaria
Ya no escucho el sonido de la lluvia
Como antes,
Se dilata la distancia
Entre la luna y el sol
Jugando a las escondidas
Ya no siento la poesía como ayer
Los versos se desnudaron
Y se marchitaron
Con la lluvia
Que gritaba con su llanto
La pesadilla de ser olvido
Un encanto de amor por las nubes
Y una caricia atípica
Oliendo a primavera
En verano
Ya no escucho tu voz como antes
Mi sordera aumento
El día que no dijiste nada
Se marcharon las aves
Y su canto desapareció del alma
Que alimentaba la vida
Ya no escucho el sonido de tus cabellos
Como antes
aapayés