Ya no percibo 
El tiempo como ayer
Las anécdotas 
Son vagabundas 
Y los versos 
Son un esqueleto de mi sueño
Ya no percibo 
Los días como ayer
Y hoy
Me someto a llorar 
Mi soledad 
En este olvido necesario
Y firme a seguir viviendo 
A seguir soñando
Pero sobre todo 
A seguir amando
Ya no percibo 
El tiempo como ayer
Desde mi rincón
Veo el mar
Y lo acaricio pronunciando 
Con mis ojos 
La belleza de este amor puro
Por seguir siendo yo
aapayés 

