He consentido el mismo error
Que del dicho al hecho,
Hay un sin fin de amaneceres
De anocheceres
En las periferias del destino
La sonrisa fingida
Un beso
Un te amo camuflado con ternura,
Alimentando el parásito
Verso en los labios,
Arrugados por el odio
Y el rencor vestido de azul,
Una mañana de buenos días
Sin sentido
Sin sentirlo
Sin el mínimo atisbo de conciencia,
Prórrogas de la duda
Del acierto a las dificultades,
Perdón
Inexistente en el discurso
-Demagogia
Aliciente tentación a la sátira pérfida del destino
aapayés