Tengo
Un diezmo de poesía
Que se pierde en el obsequio
Desequilibrado de la palabra
Amor,
Al darlo todo sin medida
Y sin condiciones
Desnudo y frágil
Por la ironía de la hipocresía
Que acaricia el rostro
Llena de ternura
Ingenua manera de expresar
Un sin fin de sentimientos
A la orilla de la poesía
Tengo en el bolsillo
Un recuerdo fiel
A la despedida
Despiadada y cruel
Al destino equivocado
Un día
Le gritamos al viento
Enloquecidos por el momento
De ese amor que crecía
Y creía en el cielo,
El infierno
Se apoderó poco a poco
De esos pasos imaginarios
A la felicidad desequilibrada
De la ignominia
Un día
Abrazamos el amor
Y la poesía
Se hizo verso
En el laberinto de nuestros cuerpos
Aunado a ello
Un alacrán
Que salpica la tentación
De escribir
Un verso deshonesto
En las comillas de tus labios
Tengo
En el bolsillo
Un diezmo lleno de poesía
aapayés