El canto distorsionó al viento
En la pradera,
En la montaña vitoreando versos
La poesía arrinconó al silencio
La soledad desnudó el olvido
El canto dispersó tentaciones
Y florecieron labios
Pregonando amores
Entonando ausencia
Desnudando rencores
El canto se hizo verbo
Se volvió poesía
En los labios de un amor perdido,
En las lagrimas de un payaso tímido
Y el canto: se transformó en silencio
aapayés