Que no nos sorprenda
La tentación de acariciar
Nuestros cuerpos,
La invitación al deseo
Y al placer compartido
Que no nos detenga
El miedo a sentir lo ajeno
A lo nuestro
Que el amor desnude
El íntimo deseo de entregarnos
Abiertos al placer
Que nos sorprenda
El momento de sentir
La adrenalina a la tentación
El miedo de amar y de entregarse a otro
Con la intimidad en la pasión
Y a la complicidad de un amor prohibido
Que no nos sorprenda
La fantasía a la tentación del deseo
De un cuerpo ajeno al nuestro
aapayés