Microbiografía de Adolfo Payés

Bertolt Brecht

Bertolt Brecht

sábado, 13 de septiembre de 2025

Mordiendo mentiras dulces














He querido bajar  
El péndulo de la verdad,  
Arrastrarlo por el cielo  
Y lanzarlo con furia  
Al infierno de la vida.  

No existe la verdad absoluta:  
Existe el pensar coherente,  
Único en cada individuo,  
Una forma superficial  
De vivir según lo que  
Te hace sentir bien.  

Vivir la vida, pese a todo,  
Hace renacer lo que eres.

Pese a todo:
Quise arrancar el péndulo de la verdad,  
Clavarlo en el viento como un puñal,  
Y ver cómo su sombra incendiaba el cielo  
Antes de arrojarlo al fango de los vivos.  

No hay verdad, sólo hay grietas:  
Cada hombre es un espejo roto  
Que devuelve astillas de luz.  
Vivimos en la orilla de lo que creemos,  
Mordiendo mentiras dulces  
Como frutas maduras.  

Pero vivir a pesar del barro,  
A pesar de los espejos  
Es resucitar en cada caída,  
Es escupir al abismo  
Y oír cómo el eco  
Devuelve tu nombre  
Convertido en trueno.

aapayés

viernes, 12 de septiembre de 2025

Su presencia era un torbellino de amor


















Cuando menos lo imaginé,  

Estaba frente a ese mundo  
Que llenaba plenamente mi vida.  

Su presencia era un torbellino de amor,  
Entre la tentación de acariciarla  
Y la impotencia de expresar lo que sentía.  

La miré, anonadado,  
Frente al sueño de mis sueños.  
Era ella:  
Una luz infinita  
Que cegaba la imaginación.  

Amarla,  
Sentirla,  
Murmurar su nombre,  
Sellarlo con un beso de ternura  
Y amarla para siempre.  

Mi sueño,  
Mi ilusión de sentir su presencia...  

Allí estaba,  
Y yo la acariciaba  
Con mis ojos  
Y con el silencio del amor.  

aapayés 

jueves, 11 de septiembre de 2025

Ese olor a café recién hecho





















Ese olor a café recién hecho 
A solas 
Aquí los muertos  
No llevan reloj
El tiempo es una tela  
Que las polillas devoran.  

Las lápidas espejos sin memoria
Guardan reflejos de sal  
Y risas ahogadas.  

Si pones el oído en la tierra,  
Oirás a las raíces  
Tejer abrazos al revés.  

Dicen que de noche  
Las flores repiten  
Los nombres que los vivos  
Ya no se atreven a pronunciar.  

Y en el aire queda  
Ese olor a café recién hecho  
Que nadie alcanza a beber.

aapayés

miércoles, 10 de septiembre de 2025

Beber su eco en mi boca












Cuando la luz cayó sin aviso,  
Ahí estabas:  
Un universo entero  
Doblegado en mi pecho.  

Eras vértigo y quietud,  
La tormenta que desarma  
Entre el deseo de tocarte  
Y el miedo de nombrarte. 

Te miré.  
Y allí, intacto,  
El sueño que no osé soñar:  
Tus ojos,  
Esa lumbre sin horizonte  
Que incendia los confines  
De lo imaginable.  

Amar tu nombre,  
Beber su eco en mi boca,  
Guardarlo en un beso  
Hasta que el tiempo  
Se rinda.  

¿Era real  
o sólo el brillo  
de mis propias ausencias?

Pero estabas.  
Y te acariciaba  
Con la mirada,  
Con el silencio,  
Con todo lo que calla  
Cuando el amor  
Es demasiado vasto  
Para las palabras.

aapayés 

martes, 9 de septiembre de 2025

Entre el parpadeo de mis ilusiones



















Acaricié un millón de versos,  
Y solo escribí tu nombre  

Con el parpadeo de mis ilusiones,  
La tentación dejó de ser  

Solo un poema en mis emociones...  
Solo el eco de quererte.  

Entre el parpadeo de mis ilusiones,  
La tentación dejó de ser  

Poema …  
Para volverse fuego,
Para volverse huella,  
Para volverse eterno,
Para volverse aroma  

¡Ay, amor!
¿Cómo borrar lo que no tiene letras,  
Lo que ya late en mi costado?  

aapayés

lunes, 8 de septiembre de 2025

Sentados en bancos de niebla














Luz
De día,  
Las flores cantan
Sus pétalos son partituras  
Que el viento descifra
Hasta las lápidas  
Se olvidan de ser piedra
Y se derriten  
En miel de sol.  

-Transición
Pero el crepúsculo  
Es un reloj de arena
Donde la luz se vuelve  
Sal en la herida
Cada grano,  
Un minuto  
Que ya no te pertenece.  

-Oscuridad
De noche,  
Las flores muerden
Sus tallos son agujas  
Que cosen silencios 
Y los muertos,  
Sentados en bancos de niebla
Juegan a repartirse  
Los nombres  
Que los vivos  
Han dejado caer.  

-Testigo
Con tu paraguas negro abierto
Bajo la luna,  
Eres el único  
Que todavía escucha  
Cómo ladra el miedo
Entre las tumbas.

aapayés

domingo, 7 de septiembre de 2025

Al lado del edificio de mi silencio













Al lado del edificio de mi silencio  
Habita un mundo  
Que no existe.  

Todas las noches  
Evocan con sabiduría  
La oración del olvido.  

Y de repente,  
El bullicio desnuda la soledad  
Y se escucha el grito del alma.  

Al lado del edificio de mi silencio  
Existe el tiempo  
Que no para de girar,  
De girar, de girar...  

Y giro la mirada:  
Se vuelve luz  
En la imaginación del testamento,  
Sin escribir nada  
Que no sea silencio.  

Al lado del edificio de mi silencio,  
Los párpados de mi lectura  
Hojean las páginas del testamento  
Sin leer nada, sin sentir nada  
En el alma de mis pupilas.  

Al lado de mi silencio  
Se derrumba el edificio de amor.  

aapayés

sábado, 6 de septiembre de 2025

Fantasma de tinta y café frío














-Mañana

Las flores abren sus corolas al sol 
Pequeñas bocas que tragan luz 
Las lápidas, mudas pianolas,  
Guardan canciones  
Que sólo el musgo sabe tocar

-Tarde

El viento hojea los nombres  
Como un libro mojado.  
Cada sílaba es una semilla  
Que el tiempo planta  
En el huerto de los olvidos

-Noche

Bajo la luna líquida,  
Las sombras tejen  
Sudarios de aire.  
Las flores ahora con dientes de plata
Mastican silencios.  

-Madrugada

Fantasma de tinta y café frío,  
Lees las estrellas  
Como si fueran  
Las líneas de su mano  
Que ya no puedes tocar.  

Y tú,  
Que viniste a sembrar adioses,  
Cosechas sólo  
El eco de tu voz  
Rompiéndose  
Contra el mármol
El murmullo del adiós 

aapayés

viernes, 5 de septiembre de 2025

Aquí los besos son estatuas de viento














Cementerio 
Es esa palabra  
Coqueta y audaz 
Que al rozar el aire  
Nos convida a café,  
A un té de ausencia,  
A silencio ungido  
Con miel de memoria.  

Aquí los besos  
Son estatuas de viento,  
Los abrazos,  
Lápidas blandas  
donde florecen  
Te quieros marchitos. 

Es un álbum sin páginas 
Solo nombres,  
Solo fechas,  
Solo el hueco  
Que deja en el pecho  
El adiós  
Cuando se hace piedra.  

Cementerio  
Última casa  
Donde el amor  
Se pone zapatos de barro  
Y camina despacio  
Hacia el olvido.  

aapayés

jueves, 4 de septiembre de 2025

Donde el tiempo se pudre




















Dialogué con las sombras  
Sus lenguas viscosas
En el vientre de piedra  
Donde el tiempo se pudre.  

Ofrendé mis sílabas  
A los dioses del suplicio:  
Cada blasfemia un hilo,  
Cada gemido, un réquiem.  

El cáliz amargo  
Fermentado en celdas
Me enseñó a beber  
La geografía del dolor:  
Mapas de orina,  
Fronteras de excremento,  
Un país entero  
Diluido en el retrete.  

Ahora llevo  
Un pantano en el pecho.  
Cuando hablo,  
Salen gusanos de plata  
Y voces que el barro  
Con dedos de alcaide
Ahogó en mi garganta.  

Nadie lo sabe
Rezaba con el silencio  
Mientras los muros  
Me escupían versículos  
De sal y electricidad.  

Y en la noche sin estrellas  
Esa que huele a cuneta
Aprendí que el infierno  
Es una letrina sagrada  
Donde los ángeles caídos  
Firman sentencias  
Con tinta de cloaca

aapayés

miércoles, 3 de septiembre de 2025

Desnuda como un verso recién nacido,




















Un segundo es un río  
Que cruza mi pensamiento,  
Y en su corriente te atrapo,  
Pez de sombra y relámpago.  

Te hago mía en la orilla  
Donde el tiempo desnuda  
Su mentira:  
No hay ayer ni mañana,  
Sólo este instante,  
Tu cuerpo escrito en el aire.  

Allí estás tú,  
Desnuda como un verso recién nacido,  
Como la lluvia  
Cuando besa la tierra  
Y la vuelve lenguaje.  

Mis manos son pájaros  
Que beben de tu piel,  
Que trazan mapas  
En la geografía de tu espalda.  

Tus pezones, dos sílabas  
De un alfabeto antiguo,  
Que mi boca descifra
Y mi lengua deletrea

Y tu sexo,  
Poema húmedo y secreto,  
Donde mi nombre  
Se pierde y se repite,  
Como el ritmo de las olas  
Al devorar la playa

Un segundo es un río  
Y yo me ahogo en él,  
En esta sed que no termina,  
En este fuego líquido  
Que nos quema sin cenizas.  

El tiempo no existe:  
Sólo tu cuerpo,  
Sólo este poema,  
Sólo el hambre  
De comernos la eternidad  
A mordiscos.  

aapayés

martes, 2 de septiembre de 2025

Que mi nombre arda en tu garganta




















Que mis manos
Sean el capricho de tus caricias,  
Y mi cuerpo
El mapa de tus pasiones.  

Que el placer se desate  
Con mi presencia
Y se fundan tu libido y mi deseo,  
Como versos ardientes.  

Recitaré tu nombre
Con la pasión escrita,  
Desnuda y eterna,  
En nuestro sexo compartido

Que mis manos
Sean lluvia de fósforo en tu piel,
Y mi cuerpo
El incendio que no quieres apagar.  

Que el placer sea un aullido,
Un relámpago partido en dos
Mientras tu boca y la mía  
Escriben blasfemias
Con la lengua.  

Recítame
Como se recita una maldición
Que mi nombre arda en tu garganta  
Y tu voz me desnuda
Hasta el hueso

Que nuestro sexo
Sea la hoguera
Donde el tiempo
Se quema

aapayés

lunes, 1 de septiembre de 2025

Tu ausencia es un pliego de ceniza



















Tu ausencia es un pliego de ceniza
Donde mis dedos queman las veredas  
Viejas monedas de la duda

Descifro el mapa de tu sombra
Un abanico de llamas azules
Que me desviste frente al espejo  
De escribir en lengua de lluvia

Amar el verso es morder la huella
Que dejó tu voz en mi costado,  
Es beber tinta de silencio 
Y firmar con nombre de niebla  
Nuestro amor en clave de exilio.  

Escribo un incendio,  
Lo siembro en la garganta 
Antes de arrojarlo al viento  
Lápida blanca de tu nombre 

Saturada el alma,  
El silencio me teje un sudario
Con el hilo de tu aliento.  

aapayés

domingo, 31 de agosto de 2025

Ritual de amarnos a escondidas



















Saturada el alma
De tanto transitar las veredas  
Obsoletas de la duda,  
Me inclino a descifrar tu ausencia  
Y descubro la dimensión  

De un abanico abierto en sentimientos  
Que en llama las tentaciones  
De escribir a solas, en la sombra,
En la soledad espiritual  

De amar el verso que trasciende,  
El alma en la lectura  
Y en la escritura sensorial  
Ritual de amarnos a escondidas.  

Escribo un verso,
Lo entono en voz baja
Con lucidez,  
Antes de besar  
Tu ausencia.  

Saturada el alma,  
Me entrego al silencio  
Que ahoga la soledad  
De vivir sin ti.  

aapayés

sábado, 30 de agosto de 2025

Escribo con tinta hecha de tus pestañas














Tu ausencia es un reloj de arena  
Que sangra minutos invertidos
Sobre mi lengua.  

Las dudas caballos ahogados
Galopan en círculos  
Dentro de un frasco de medicinas vencidas  

Leo tu nombre escrito en el muro  
Con uñas de estrellas muertas
Y el abanico de tus emociones  
Se abre como un paraguas  
Dentro de mis venas

Escribo con tinta hecha de tus pestañas
mientras la soledad una sirvienta ciega
Ordena mis huesos en forma de alfabeto

Te canto con la voz de un violín  
Enterrado en el jardín de mi infancia 
Antes de vender tu recuerdo  
Al mercado de las sombras

Saturada el alma,  
El silencio construye un ascensor  
Que desciende al centro de mis costillas
Donde tu risa fosilizada  
Ilumina los carteles de -se vende-
En el museo de mi pecho

aapayés

viernes, 29 de agosto de 2025

En el abanico misterioso del olvido.




















En el Abanico del Olvido

Cada día que pasa  
Es un cuadro de imagen,  
Uno que grabo  
En el abanico misterioso del olvido.  

Unos son eternos,  
Otros, solo momentos,  
Y en su mayoría,  
Un segundo de ilusión.  

Ilusiones perdidas  
Con la cuota pérfida del entierro,  
Amistosa manera de doblegar  
El pasado escrito  
Con las pestañas del silencio.  

Impasible,  
Apacible gesto  
En la poesía coloquial de un beso.  

-Muaaaaaak-
Y guardo silencio.  
Absorbo el tiempo  
Y me bebo la nostalgia  
De un pasado estéril  
En la cúspide del olvido:  
Pasado cierto  
De un mañana incierto.  

aapayés

jueves, 28 de agosto de 2025

Mis párpados son pájaros ciegos














Al lado del edificio de mi silencio  
-muro de sombra y ecos desplomados-  
Late un mundo que nadie ha habitado.  

Todas las noches,  
La memoria teje su red  
Con hilos de olvido.  

Y de pronto,  
El bullicio rasga su disfraz:  
La soledad grita  
Con la voz rota del alma.  

Al lado del edificio de mi silencio  
El tiempo es una rueda  
Que muerde su propia cola.  

Giro la mirada:  
La luz es un testamento  
Escrito en blanco,  
Firmado por el aire.  

Al lado del edificio de mi silencio,  
Mis párpados son pájaros ciegos  
Que vuelan sobre el libro del tiempo.  

No leen.  
No sienten.  
Sólo arrullan  
La oscuridad de mis pupilas.  

Al lado de mi silencio,  
El edificio del amor  
Es sólo polvo  
Y una última palabra nunca dicha.  

aapayés

miércoles, 27 de agosto de 2025

Sonrío con la carcajada en las manos




















Con el capricho demoledor  
De la tristeza,  
Me alejo de la alegría,  
Del llano amargo, de la derrota,  
Del gesto ignorante  
Del silencio.  

Me precipito, audaz,  
A la discordia.  
Me desnudo en la noche  
Bajo el brillo celestial  
De la luna.  

Un guiño murmura su silencio,  
Se deja llevar a escondidas  
En las peripecias del destino.  
Y sonrío a solas,  
Bajo el brillo de la inocencia,  
Bajo el capricho de la tristeza
Bajo un amanecer  
A la orilla de la cama,  
enamorado de tu belleza.  

Con el capricho demoledor  
De la tristeza,  
Sonrío con la carcajada en las manos  
Y los besos en el bolsillo  
De la conciencia.  

Y me dejo llevar,  
Literalmente,  
Por la poesía en mis labios.  

aapayés

martes, 26 de agosto de 2025

Fui un borrador escrito en sangre de mujer




















I. Portada
Vientre Materno
 

Antes de ser tinta, 
Fui un borrador escrito en sangre de mujer.  
Mi primera palabra:  
Un acorde de células  
Que aprendió a repetir  
El mismo verso una y otra vez.  


II. Capítulo 
Infancia: Letras de Leche

Mis aurículas páginas húmedas
Absorbían el mundo en cursiva:  
El arrullo era una coma,  
El llanto un signo de exclamación  
Caído de la cuna.  

III. Capítulo 
Amor: Erratas del Deseo

Ahora late en caracteres braille  
Cuando tus dedos pasan por mi línea 13:  
Aquí yace el error más bello:  
Haber confundido tu nombre  
Con una sílaba de luz

IV. Glosario 
Las Cicatrices 

Infarto: párrafo tachado con furia.  
Arritmia: poema en verso libre.  
By-pass: nota al margen que Dios escribió  
Con lápiz rojo en el examen final.  

V. Colofón 
Última Edición
 
Cuando el médico cierre mis tapas de piel,  
Busca entre mis pliegues:  
La mancha de vino en la página 72  
Es donde tu boca  
Subrayó mi silencio  
Con tinta de granada.

aapayés

lunes, 25 de agosto de 2025

En este teatro de sombras dócilmente sangrantes




















Sabes que la locura es un Dios 
No es desatino, sino revelación:  
El único pecado que ilumina  
En este teatro de sombras dócilmente sangrantes.  

No hay oración más pura  
Que el gemido de un pensamiento  
Desgarrándose de su cadena.

La cordura es un crimen pulido,  
Una celda con cortinas de seda.  
Yo escupo su nombre  
Mientras escribo versos con las uñas  
En los muros de mi calavera.  

Lucifer no es ángel caído,  
Sino el primer loco:  
El que prefirió arder  
A arrodillarse ante espejos vacíos.  

Sabes que la locura  
Es el único dios que no miente.  
Su saliva es de tinta negra,  
Su evangelio:  
El grito que deshace el mundo.  

aapayés

domingo, 24 de agosto de 2025

En las antípodas del pensamiento.




















He llegado a la conclusión  
De que el armagedón de mi tentación  
No es fuego, sino un diccionario ardiendo,  
Donde cada palabra olvidada  
Se convierte en un verso mediocre,  
Huella de un dios borracho 
En las antípodas del pensamiento.  

Recíproco es el amor: 
Dos espejos enfrentados  
Que devuelven un arcoíris en si bemol menor,  
Mientras alguien toca el piano de la discordia  
Con manos de arena.  

He concluido que tú y yo  
Somos la pesadilla de Safo y Neruda:  
Si unimos nuestros labios,  
El acto será un plagio del universo,  
Escrito en tinta invisible  
Bajo el párpado de la luna.  

He llegado a la conclusión  
De que el armagedón de mi silencio  
No es el beso olvidado en el escritorio,  
Sino la goma de borrar
Que devora las cartas de medianoche,  
Letra a letra.  

Si alguien lee este poema,  
Que no sea el desamor del olvido,  
Sino un relámpago mordiendo  
El horizonte de otro poema.  

He concluido que la dinámica del alma  
Es un péndulo de ceniza  
Mecido por el estupor del silencio.  

aapayés

sábado, 23 de agosto de 2025

Grabar en la eternidad del tiempo



















Hoy deliré tanto  
Que quise suicidarme en la poesía,  
Pero solo nacieron versos  
Que ansiaban ser leídos a gritos,  
Con la misma pasión  
Con que habían sido escritos.  

A carcajadas hilvanaron dulzura,  
Como tormenta de rayos,  
Provocando en la lectura  
El eco de amores escondidos.  

Hoy deliré poesía  
En lo más profundo del infierno,  
Y surgieron los mejores versos,  
Aquellos que el cielo prohibió  
Grabar en la eternidad del tiempo.  

Que la paz sea contigo,  
Misericordia, tentación de amar.  

aapayés

viernes, 22 de agosto de 2025

Tú, mi siempre y mi misterio




















Que tu adiós sea como el vaho  
De un jazmín entre la bruma,  
Que en el vientre de la tarde  
Guarde el nido de nuestra lumbre.  

Que en la sombra de las horas,  
Sin voz, sin tiempo, sin nombre,  
Nazca el amor que un día  
-Entre sueños y jirones-
Tejió su canto en nuestro pecho  
Con hilos de sol y espuma.  

Que tu piel, suave memoria,  
Sea brisa en mi costado:  
Que tu beso, dulce herida,  
Florezca en el desvelo,  
Y en el río del olvido  
Su fragancia sea remanso.  

Que en la huella de tus pasos  
Quede un polvo de mi aliento,  
Y en tu cuello, las guirnaldas  
Que trenzó nuestro silencio.  
Que lo eterno sea un instante  
Y lo prohibido, un reflejo  
De dos astros en el agua  
Deshojando su destierro.  

Que tu nombre, leve aroma,  
Me persiga como un verso,  
Y en la sed de mis palabras  
Sea miel, sea fuego, sea cielo.  

Perfume que no se apaga:  
Tú, mi siempre y mi misterio.  
El tiempo ya no es medida,  
Sino tu latido dentro.  

aapayés

jueves, 21 de agosto de 2025

La mecha de la duda




















Sabes que la locura  
Es el único pecado sin penitencia:  
Ser honesto en un mundo  
Que venera máscaras.  

No es delirio, es romper el hechizo,  
Merodear el pensamiento  
Hasta quemar las brumas del olvido.  

Una minúscula tentación:  
Escribir versos de lucidez  
Sobre el muro de la cordura.

Sabes que la locura  
Es el elixir que nos condena a saber,  
Maniatados en este infierno  
Donde hasta la inocencia  
es una celda.  

Yo no me rindo:  
Soy el mismo  
Cuando Lucifer enciende  
La mecha de la duda.  

Sabes que la locura  
-al final- 
Es el único acto de fe.  

aapayés

miércoles, 20 de agosto de 2025

En las faldas de la montaña de tu cuerpo




















Conozco la montaña del sentimiento,  
Me ahoga, sigilosa,  
Y tartamudeo al decir su nombre,  
Como metáfora fugaz  
En el arrecife del pensamiento.  

El acantilado del olvido  
Se funde todas las tardes  
Con el poniente,  
Bajo el coloso cielo de la vida.  
Efímera manera de pensar en ti:  
Nostalgia, melodía del beso  
Que me dejó la caricia de la esperanza,  
De amar en pleno cielo,  
En las faldas de la montaña de tu cuerpo.  

Conozco la montaña del olvido  
Y me dejo llevar por el olor de las mañanas,  
Por el despertar a tu lado  
Cuando ya no estás conmigo.  

Conozco la razón de ser  
Un verso en tus labios,  
Una poesía en tus manos.  

Conozco la montaña de tu cuerpo  
Cuando amas a escondidas,  
Mirándote en el espejo del deseo.  

aapayés

martes, 19 de agosto de 2025

Partiendo mi alma en dos con tu pluma












I. PACTO

¿Un verso a cambio de qué? reíste,
Partiendo mi alma en dos con tu pluma.
La mitad se ahogó en tinta negra,
La otra...
Ardió como un evangelio
Escrito en piel de hereje. 

II. ESCRITURA

Hoy deliré tanto
Que firmé mi nombre
En el contrato de la poesía. 
Los versos que nacieron
¡ja!
Tenían rabo y cuernos,  
Y reclamaban ser leídos
En voz alta
En medio de la misa de domingo. 

III. TORMENTA

A carcajadas de trueno,  
Tejíamos blasfemias dulces,
Como abejas zumbando  
En el oído de Dios.
Cada palabra, 
Un relámpago
Clavado en la cruz del viento. 

IV. JUICIO

¿Los mejores versos? rugiste  
¡Son los que arranqué 
Del vientre de los ángeles caídos!
El cielo los maldijo,
Pero yo... 
Los vestí de seducción  
Y los solté en tu boca 
Para que los escupas 
Con sabor a eternidad. 

V. FINAL 

Que la paz sea conmigo...
Perdóname, Padre, 
Por estos versos 
Que son  
Besos de serpiente
Y hostias de hiel.  
Amén. 
 
Diálogo con el diablo en 5 actos 

aapayés

lunes, 18 de agosto de 2025

Somos la pesadilla de la poesía




















He llegado a la conclusión  
De que el armagedón de mi tentación  
Es un oráculo paralelo,  
El deseo absurdo de ser  
Un poeta mediocre  
En las antípodas del pensamiento.  

Recíproco es  
La dinámica del amor:  
Un arcoíris en si bemol menor  
Sobre el piano de la discordia.  

He concluido que tú y yo  
Somos la pesadilla de la poesía.  
Si unimos nuestros labios  
Para hacer el amor  
Bajo el luminoso verbo,  
La pasión quedará escrita en el alma.  

He llegado a la conclusión  
De que el armagedón de mi silencio  
No tiene nada que ver  
Con aquel beso olvidado  
En el escritorio  
Del cuarto de medianoche.  

Si alguien lee este poema,  
Que no sea el desamor del olvido.  

He concluido que la dinámica del alma  
Está unida al estupor del silencio.  

aapayés

domingo, 17 de agosto de 2025

Los versos más puros de tu ausencia




















Que el perfume de tu adiós  
Quede grabado  
En el vientre del ocaso,  
Y nazca en silencio  
El amor que un día  
Dibujamos  
Entre sábanas y sueños,  
Entre gritos y gemidos consagrados.  

Que la esencia de tu piel  
Permanezca eterna  
En el aroma de mis noches,  
Con tu beso marcado  
En la piel del olvido.  

Un rastro de mí  
En la huella de tus pasos,  
Y en tu cuello  
Mis dientes clavados,  
En lo prohibido de tu espalda  
Y en lo ajeno de tu destino.  

Que el eco de tu nombre  
Viva en mi silencio  
Para escribir  
Los versos más puros de tu ausencia.  

Fragancia que eres tú:  
El resto de mi vida,  
El tiempo detenido 
En dos cuerpos.  

aapayés

sábado, 16 de agosto de 2025

Tengo la sucursal de los muertos














Tengo la morgue de la justicia:  
Los políticos son cadáveres con corbata,  
Inyectados de formol y votos 
Para simular vida.  

Sus discursos huelen a autopsia reciente,  
A papel notarial pegado en la piel  
De un desaparecido.  

El pueblo les aplaude  
Como se aplaude un truco de magia:  
Sabiendo que hay un cadáver  
Escondido en el ataúd de la Constitución.  

Tengo el teatro de los noticieros:  
Hombres verdes con ojos de teléfono,  
Repitiendo cifras como si la sangre  
Fuera un decimal que se redondea  
hacia abajo.  

-¿Quién les dio permiso  
Para gobernar con las manos llenas de gusanos?- 
Pero así vivimos:  
Zombis firmando cheques  
con los dedos podridos,  
Mientras el reloj nacional  
Avanza en reversa  
Hacia el medievo.  

Tengo la sucursal de los muertos

aapayés

viernes, 15 de agosto de 2025

El silencio era nuestro verbo




















Sin palabras
Inventamos un idioma  
De piel y luna,  
Un poema mudo  
Escrito en el aire  
Que solo nuestras sombras  
Traducen.  

Nos amamos  
Con la gramática torpe  
De los cuerpos,  
Mientras la noche se deshace  
En besos imaginarios,  
En esquinas que inventamos  
Para perdernos.  

El silencio era nuestro verbo,  
El tacto, su conjugación
Y reíamos,  
Porque no hacían falta nombres  
Para nombrarnos.  

aapayés

jueves, 14 de agosto de 2025

El veneno de tu aroma


















Que tu adiós no sea un suspiro,  
Sino un tajo en mi costado,  
Que la herida lleve tu nombre  
Y sangre versos desgarrados.  

Que el vientre de la despedida  
Guarde el eco de nuestros gritos,  
No el silencio, no el olvido,  
Sino el jadeo de tu ritmo  
Marcado a fuego en mis huesos,  
En mi boca, en mis delirios.  

Que tu piel no sea recuerdo,  
Sino hambre que me devora:  
Dame tus uñas en mi espalda,  
Tus dientes hundidos en mi boca,  
La sal de tu sudor en mis labios,  
El veneno de tu aroma.  

No quiero rastros de polvo,  
Sino cicatrices, marcas:  
Las tuyas en mis caderas,  
Las mías en tu garganta.  
Que lo prohibido no sea sombra,  
Sino puñal, sí, que clave  
Nuestros nombres en la noche  
Hasta que arda la mañana.  

Que tu nombre no sea verso,  
Sino rugido en mi tripa,  
Un aullido entre mis dientes,  
Una condena que me empuja  
A morderte el alma entera  
Y escupirla en cada esquina.  

No hay fragancia, hay fuego.  
No hay tiempo, hay espinas.  
Tú y yo: dos bestias  
Desangrando su saliva.  

aapayés

miércoles, 13 de agosto de 2025

La sombra de un pájaro que olvidó su nombre




















La poesía es muda,  
Expresión sin voz,  
Escrita con el alma vacía,  
En silencio.  

Un momento perturbador,  
Exilio literario,  
Nostalgia.  

La poesía es un grito  
Ahogado en tinta fría,  
Un alfabeto de sombras  
Escrito en el vacío.  

Es el exilio del eco,  
La nostalgia sin nombre,  
Un silencio que quema  
Como luna en la nieve.  

La poesía es un pez de yeso  
Que nada en el té de la madrugada,  
Sus escamas son letras rotas  
Que se derriten en el alambre.  

Es el susurro de un reloj enterrado,  
La sombra de un pájaro que olvidó su nombre,  
Un diccionario quemándose despacio  
En la boca del viento. 

aapayés

martes, 12 de agosto de 2025

Tengo el sistema digestivo del estado












Tengo la navaja de la justicia 
Afilada por la dictadura,  
Cortando sentencias  
En tiras de periódico viejo  
-Papel higiénico del poder-.  

Las mentiras son perros de presa
Con correas de millones,  
Olfateando el miedo  
En las venas del pueblo.  

Tengo el sistema digestivo del estado:  
Tragamos eslóganes,  
Cagamos silencio.  

El oro no brilla:  
Es pus seca  
En las grietas de las fábricas.  

Tengo la fábrica de realidades  
Pantallas que parpadean  
Como postes eléctricos
En un campo de prisioneros.  

¿Quién vigila a los vigilantes?  
Nadie.  
Solo el zumbido de cámaras
Y el eco de un disparo
En el noticiero de las 9.  

aapayés

lunes, 11 de agosto de 2025

Sumido en el exilio imaginario




















La poesía  
Es un germen lírico,  
Sumido en el exilio imaginario  
Del silencio.  

Hundido en la nostalgia,  
Ungido por la soledad,  
Instantánea del momento.  

La poesía  
Es un pelotón de fusilamiento  
Que aniquila el alma  
Antes de ser escrita,  
En silencio.  

aapayés

domingo, 10 de agosto de 2025

Blasfemia Poética en Si Bemol Menor













He llegado a la conclusión  
De que Dios es un poeta mediocre  
Borracho de tinta sagrada
Que escribe biblias con errores de imprenta  
Y firma los milagros  
Con un Auténtico: Yahvé (fake) 

«Carpe Diem sed Diem iam putridum est»
Aprovecha el día... 
Pero el día ya está podrido 

Recíproco es el amor:  
Dos demonios copulando  
Sobre un misal robado,  
mientras el Espíritu Santo  
Travestido de paloma ebria
Vomita hostias radioactivas  
Sobre el piano de la discordia.  

Hemos concluido, amante funesto,  
Que este poema es el tercer testamento:  
Aquí Cristo es un verso maldito,  
María Magdalena una metáfora  
Y el Espíritu Santo  
un corrector de estilo  
Que se suicidó en el verso 13.  

He llegado a la conclusión  
De que la Última Cena  
Fue un micrófono abierto de judas  
donde todos leyeron  
poemas robados.  

Si alguien lee esta blasfemia,  
Ojalá sea el dedo de Satán  
Señalando el verso  
Donde la fe se desangra  
Como tinta en el agua bendita.  

aapayés

sábado, 9 de agosto de 2025

Escribiendo en el olvido lejano de la luna




















Encontré un renglón de ideas
En los arbustos del pasado,  
Pasado inquieto,  
Inquieto versos resucitando  
La nostalgia.  

Encontré un renglón de besos
En la almohada de tus piernas,  
Y saboreé la dulzura  
De tus secretos.  

Encontré un renglón de versos 
Olvidados en noches de sosiego,  
Escribiendo en el olvido lejano de la luna.

aapayés

viernes, 8 de agosto de 2025

Donde amor se escribe con los dientes















Glosario de tu piel,
Inventamos un alfabeto  
Con las junturas de los huesos,  
Un diccionario de sombras  
Donde amor se escribe con los dientes

Tú me enseñaste  
La sintaxis del vértigo
Cómo caer en espiral  
Hacia adentro,  
Hacia ese lugar  
Donde la luna  
Descompone su luz  
En sílabas mojadas.  

Fue entonces,  
Cuando el silencio  
Nos devoró las palabras,  
Que entendimos:  
El eco de los cuerpos  
No necesita traductor.  

aapayés

jueves, 7 de agosto de 2025

Que la tinta sea tu sábana














Hoy quise arder en el poema,
Convertir mi piel en pergamino,
Pero solo brotaron versos 
-Gritos secos
Que mordían la página 
Como lobos hambrientos.  

Fue una risa de ciclón,
Azúcar y cuchillos bailando,
Mientras los versos -rayos 
Incendiaban el silencio
Con su sed de ser escuchados.

Hoy escribí con carbón
En las paredes del infierno,
Y crecieron los versos
-Frutos podridos del Edén  
Que ningún ángel osa recoger.  

Que la tinta sea tu sábana  
Y yo, la sombra que la mancha.  
Amén.

aapayés

miércoles, 6 de agosto de 2025

No he dejado de ser yo




















Sabes que la locura  
Es el placer de ser honesto  
En este infierno de hipocresía.  

Merodear el pensamiento  
Y aniquilar la nostalgia del olvido.  

Minúscula tentación: escribir  
Un verso de lucidez  
En el oscuro sedentarismo  
De la cordura.  

Sabes que la locura  
Es el elixir del saber,  
Maniatados en el infierno  
De la inocencia.   

No he dejado de ser yo  
Cuando Lucifer  
Ilumina la tentación de la duda.  

Sabes que la locura  
Es el placer de ser honesto.  

aapayés

martes, 5 de agosto de 2025

Tu cama es un continente recién nacido














I. El Exilio

Geografía del despojo del alma
La tristeza abre su mapa de fronteras quemadas:  
Me declaro país ilegible,  
Lengua rota en el mercado de las alegrías oficiales.  

II. La Ceremonia

En el templo de los derrotados  
Donde el silencio es un sacerdote
Con manos de ceniza 
Ofrezco mi voz como moneda falsa  
Y recibo a cambio  
El sello húmedo de la luna en la nuca.  

III. El Tránsito

Noche: puente de cristal que crujo al pasar.  
Mis pasos dibujan un alfabeto de sombras  
Sobre el mármol de los dioses que ya no leen.  

V. La Transfiguración

Amanece.
Tu cama es un continente recién nacido.  
Mis labios dos pájaros con plumas de tinta 
Traducen el himno de tus caderas  
Al idioma original del fuego.  

V. El Naufragio

Ahora guardo carcajadas  
En el museo de los gestos prohibidos.  
La poesía me atraviesa como un relámpago  
Y dejo que la corriente  
Me escriba.  

aapayés

lunes, 4 de agosto de 2025

Cada día es un espejo roto















-Crónica del Olvido

Cada día es un espejo roto  
Fragmento de sombra grabado  
En el abanico de lo inasible.  

Algunos pliegues son eternos,  
Otros, apenas un parpadeo.  
La mayoría,  
El rescoldo de una luciérnaga  
Ahogada en su propia luz.  

Y así se doblega el tiempo:  
Con la escritura invisible  
De las pestañas del silencio,  
Con la perfidia dulce  
De un entierro sin lápida.  

Impasible,  
El gesto se hace verso,  
Poesía coloquial  
De un beso que fue eco.  

-Besos-
 
El vacío guarda su réplica.

Bebo el tiempo,  
Trago la nostalgia  
Como un vino de huesos,  
Y en la cúspide del olvido,  
Solo queda este presente:  
Semilla de un mañana  
Que nunca germina.  

aapayés

domingo, 3 de agosto de 2025

Cárceles clandestinas














Diálogo en los abismos
He hablado a solas  
Con el excremento  
En una celda fría  
Que olía a infierno.  

Cambié mis palabras  
Por jergas de tortura,  
Mientras el orín  
Néctar de injusticia
Me recordaba  
La barbarie humana,  
El hocico impune  
De lo deshumanizado.  

Fue una charla amarga  
Con el excusado,  
Su sabor a patria  
Ensangrentada,  
A monedas podridas,  
A sonrisas crueles  
De un sistema  
Que agoniza sin prisa.  

Desde entonces,  
Me queda el alma  
Con gusto a mierda  
Y cicatrices de odio

Todo ocurrió  
En una cárcel sin nombre  
De El Salvador,  
Un día sin fecha  
Hecho de desaparecidos.  

Y guardé silencio  
Las noches infinitas  
En que me obligaron  
A beber el horror  
En vasos de oscuridad.

Cárceles clandestinas 

aapayés

sábado, 2 de agosto de 2025

Bebiendo silencio en el camino

















Luz y Oscuridad en fuga 
El día 
Las cruces son cometas ancladas
Que navegan sobre el pasto.  
El sol deshoja  
Los nombres en las lápidas,  
Y los convierte en letras de azúcar

Pero al caer la tarde,  
La luz se vuelve vidrio molido
Cada rayo lastima  
Como un te olvido
Dicho a media voz.  

En la oscuridad 
Las flores queman sus pétalos
En hornos de luna.  
Sus cenizas faros invertidos 
Iluminan hacia abajo
Hacia donde los muertos  
Aprenden a ser raíz

Con tu café frío en la mano,  
Eres el único  
Que todavía lee epitafios
A la luz de una cerilla
Bebiendo silencio en el camino 

aapayés