Sentimiento acumulado en el banquillo de los acusados

La mejor manera de olvidarte
Es amarte sin prejuicios
Sin rencor,
Doblo el pasado y lo dejó olvidado en el escritorio
Para sanar las circunstancias
Que derivaron a lo prohibido,
Veo una mariposa posar en el jardín
Y me mira, me coquetea con sus alas
Y me convida a volar por el pasillo
De un escritorio vacío

En el quedó doblado el pasado
Y sin llantos, ni reproches
Se fueron esparcidas por los aires
Con el aleteo efímero de una mariposa

La mejor manera de olvidarte
Es amarte a pesar de todo y tanto,
Sentimiento acumulado en el banquillo de los acusados,
Bohemia solitaria
En los callejones de los bares,
Puteríos donde nace la poesía,
Burdeles enamorados de un cigarro perdido
En la oscuridad del silencio

La mejor manera de olvidarte
Es amarte, con el amor eterno a las dificultades
De los versos enredados en las piernas,
En plena luna llena
En el invierno sedentario del tiempo

Me bebo el vino a tu manera
Y me fumo un porro en tu nombre,
Pensando en vociferar las tendencias
De un día mas sin tu amor
De un día mas sin tu amor

La mejor manera de olvidarte
Es amar a pesar de todo

aapayés

Malabares en el escritorio imaginario

Me puse a escribir
La última palabra
En el camino
Que juntos quisimos andar,
La coma desnuda
Y los puntos suspensivos,
Se quedaron solos por el sendero,
Equivocado anden de la vida
Del beso
Del amor en carne viva
Del vientre imaginario
De las manos acariciando el viento

Me puse a escribir sandeces
Y solo brotaron versos sin sentido,
Un hazme reír agotador
Agitador de tentaciones espontaneas,
No esperaba leer poesía
Menos escribir un versos con sentido humano
A pesar de tantos obstáculos,
La vida sin poesía
Es un abismo en el alma
En el pecho izquierdo de la palabra

Me puse a escribir
Pensando otra vez 
Amanecer enamorado de un mañana austera
De melancolías vagas y siniestras
Y no escribí nada
Nada referente a ti
Solo en la locura de creer siempre en mi

Me puse a escribir
Malabares en el escritorio imaginario
Sin escribir un coño referente a ti

aapayés

Se esfumó la idea de amarte

Se esfumó la idea de amarte
Ese rompecabezas imaginario
Que dibujaba las burbujas en el cielo
Con los alacranes jugando con el tiempo
Y los deseo de un amor incomprensible,
Silueta de un perfecto cangrejo
Marchando al ritmo del pasado,
Tuviste tiempo de amar
O de odiar al infinito escarnio de querer
A la manera de un cien-pies
Desfilando en la heladera de la  vida,
Una nevera enjaulada
Con los ingredientes para merendar soledades

Se esfumó la alegría
Que se apoderaba de la nostalgia
Sinónimo de un cielo sin estrellas
De una luna sin brillo

Se esfumó la manera de hacer poesía
De escribir versos en la espalda
De una pintura sin colores
Sin expresiones en las esquinas

Se esfumó la manera de vivir viviendo

aapayés

La nada tiene existencia en la memoria

Silenciar muchas veces
Los hábitos de amar,
Para poder retorcer las tentaciones
De un aguinaldo a solas,
No llueve sobre mojado en verano,
La primavera me desnuda
Con los colores de tus besos,
Me arrodillo al otoño,
Para dejar de sentir el olor a lluvia
El invierno me regocija
Del frío

Silenciar las llamadas,
Para poder seguir siendo libre,
Libre de tentaciones amargas
De  manipulaciones escritas
En las videos llamadas,
Coqueteando con las redes sociales,
Sin comentarios
Con los me gusta de un sin fin de ideas,
De palabras anónimas

Ahuyentando la armonía del sol y luna
La nada tiene existencia en la memoria,
De un colibrí
Volando en los espermatozoides de un desconocido,
De un hazme reír en silencio
De un codazo en la pierna
Para iniciar el cortejo sexual,
En la cama de un hotel desconocido
De un motel conocido

Silenciar las llamadas
Para vivir, para vivir
Para gritar sonriendo 

aapayés

Agitando la cortina de mi silencio

Sinceramente
Sin sentido alguno
Te vi pasar por la ventana
Agitando la cortina de mi silencio,
Un armadillo imaginario
Interrumpió la sonrisa
Oculta en el armario de mi locura
Loco por el amor
Acaricié la ventana
Y la cortina me guiño sus deseos
De gruñir la esencia de un amor
Versando locura

Una cama desnuda
Describió la oruga
Gimiendo de placer bajo la sombra
De un sedentario pensamiento
Dibujando caracoles de algodón
En la inmediación de tus piernas

Sinceramente
Me enamoré con sentido
Del humor olvidado en el cangrejo,
De un rompecabezas
Que apenas comienzo a comprender

La silueta precoz del viento
Enamoró la cortina de mi soledad

Quién te dijo que sería fácil,
Tararear la locura de un porvenir imaginario
En el asfalto de la vida,
En el rincón de un loco enamorado,
De un verso torturado,
De un poema abandonado

Nadie es poeta en casa ajena
Es poeta en su casa,
En la ilusión de serlo,
En la imaginación de un ciego,
Cuento contigo,
Para rociar el cielo
De sonrisas coqueteandole al viento

Sinceramente, no sé que hacer
En el baño de mis dificultades
A solas mirando caer el agua,
Para bañar las penas con sentido

Sinceramente me enamoré sin sentido
De una hormiga con sentido

aapayés

La abrumadora decencia de decir te amo

La abrumadora demencia 
De decir te amo,
Con la mirada puesta en el bolsillo
De un inconsciente y tolerante disimulo,
Me quedo enamorado de la nostalgia
De la ingenua tentación de amar
Amarte
Soñarte
Tenerte
Arroparte con la poesía mas triste,
Sin oxigeno
Sin contaminación verbal
Emocional
Sentimental
Ambiental,
De un deseo coloquial,
Coloque la imagen perfecta en ti
Bajo el calor de la poesía
Y de los versos mirando a ti,
Desde el angulo imaginario
De una tentación locuaz
Y austera de amar sin perdonar

La abrumadora decencia de decir te amo

aapayés

Una historia de amor

-¿Donde vives?
Aquí
-Allá
Si
-¿Y que hacemos?
Terminar
-Todo
Si

Una historia de amor

aapayés

En la oscuridad del silencio

Pueda ser
Que todo sea una tontería
Una porquería inanimada
Sin argumento y sin sentido,
Lo vivido
Lo encarnado en los tiempos difíciles,
Fáciles de llevar, de caminar
De argumentar lo necesario,
Para quedarse perdido
Mirando las estrellas durante el día,
Y por las noches mirando el sol,
Sin sentido
Sin aviso
Sin retoques
Sin nada que decir
Sin nada que agregar,
Mudo, ciego y sordo
Desde lo mas profundo del alma

Pueda ser
Que todo tenga sentido
Si me acompañas de la mano por el camino
Pueda,
Todo puede suceder,
Todo pudo haber sucedido
Sin sentido,
Y con el sentido único de vivir solo
Mirando el mar
En la oscuridad del silencio,
Bajo el resplandor de la luna, sin ti

Pueda ser
Cómo pueda que no,
Que mañana despierte a tu lado
A tu manera de vivir soñando,
Sin compromiso
Sin etiquetas de un amor perdido,
Perdido me quedé
Ofreciéndote la luna
Sin saber que eras tu,
La  abreviación del tiempo

Un beso sin sentido
Y un orgasmo con sentido
Del placer enamorado con contenido

Un beso,
Como el adiós de un ayer con sentido,
Pudo ser,
Nada deseado

Pueda que si
Pueda que no,
Todo depende de como vivamos el compromiso
Sin sentido, todo, todo puede suceder

Un toque con sentido humano
Con el porro entre los labios,
Para vivir el momento

aapayés

Levantar la mirada y seguir viviendo

Alzar la voz
Y seguir amando,
Escuchar el alma
Estruendo emocional de la vida
Del beso enamorado
De la caricia fortuita en tus labios
Con el cálido despertar del tiempo

Alzar la voz
Y estremecer los poros
Con una caricia hecha poesía,
En el renacer de tus sentidos
Es amar sin condición la vida

Alzar la voz
Y versar las dificultades en silencio,
Merendar la nostalgia sin remordimientos
Sin el menester deseo de seguir soñando,

Levantar la mirada y seguir viviendo

aapayés

Con los labios pronunciando tu nombre

Volver la vista atrás
Y encontrar en los escombros
La sabiduría que en ella dejamos,
Con los pasos enjutados
Y con las manos atadas
Al encuentro esperanzador de un verso enamorado
Enjutado al cielo,
Al rostro inmaculado del silencio
De la poesía moribunda
Y vagabunda en la enciclopedia de la vida,
Nos deja el sabor amargo
A la derrota
A las lagrimas vertidas en silencio
Al llanto anonadado en el exilio,
En los besos tiernos de un amor vengativo
Torcido en dos
Entre la dislexia y la discordia
La avaricia de ser honesto

Volver la vista atrás
Y navegar con las manos abiertas al futuro,
No dejo caer el alma
El cuerpo se balancea  y gruñe la memoria,
Mezquino artefacto para encontrar pausas
En cada linea escrita en el pasado,
En el pecado,
No tengo memoria
La dejé doblada en el anden del olvido

Me quedo en el presente
Y con los labios pronunciando tu nombre,
Me dejo llevar sin decir una mirada
Al pasado
Con un beso en el porvenir
Y un abrazo al silencio llanto de amar

Un verso me robó el pasado
Y quise caminar con el
En los cristales de la poesía sin ti

aapayés

La ternura de un amor incondicional a la poesía

Cuando por casualidad te encuentras
Con las despedidas furtivas
Acorralado en la distancia
Sin la menor respuesta a tal oprobio
Sonrío
Y me regocijo con la mirada puesta en el futuro,
Cruzo los brazos
Y me acomodo en el sofá
Y fumo un argumento sin expresar
Sin manifestar el mínimo rencor,
Beso la ternura despedida
Y abrazo con dulzura la soledad
Amada platónica
En un rincón congelado
Y sin decir tu nombre

Me regocijo
Y grito al cielo
La ternura de un amor incondicional a la poesía

Te beso
Te abrazo
Y me despido con el cielo abierto a mi
Para sostener el tiempo

Una sonrisa de adiós
Con la esperanza de seguir amándote
A pesar de todo

aapayés   

Un huracán de sueños

Tengo un huracán de ilusiones
Que trasciende mas allá de un simple suspiro,
Un huracán de sueños
De tentaciones incrustadas en el infinito
Sentimiento del corazón

Llevo un huracán de versos
Lienzos mezclados con poesía,
Con los amaneceres
Con los sías soleados de amor
De lunas en el ocaso
Interior menester de amar

Tengo un huracán de sensaciones
Que trasciende mas allá de lo que somos

Un huracán de tentaciones

aapayés

La sabiduría de acariciar poesía

No te pido que seas perfecta
Que sea la inmaculada primavera
En un ir y venir del tiempo,
Los versos
Que sin sentido escrito lees,
Son los parámetros
De un pensamiento aislado
En las noches frías del norte,
No me queda más que soñar
Contigo,
Sin argumento alguno por amarte

La sabiduría de acariciar poesía
Me relega a lo mas obtuso
De un argumento sin sentido

No pido nada, mas que ser,
El que te inspira a seguir soñando

aapayés

Un encuentro sin palabras

No encuentro las palabras,
Para expresar lo que siento
Lo que pienso y reanima el alma

Me dejo llevar
Por el instinto de amarte
De pensarte
De sentirte
De llevar en mis entrañas
Tu presencia como el aroma de primavera
Como el viento de tus caricias
Y de tus besos mordiendo tentaciones

No encuentro palabras
Para expresar lo que vivo por ti

Un encuentro sin palabras

aapayés

Los rostros de un poema sin sentido

Un punto de nostalgia
No es un punto de partida,
Es un silencio
Como el viento

Me llevo en los ojos
Los rostros de un poema sin sentido,
Con sentido humano
En los avatares de un verso,
Doblo la memoria
Y la dejo caer en el sofá,
Para poder dejar de ser
La incógnita del libro de poesía

Sin títulos
No hay libros
Ni poesía alguna
Que transgreda la palabra

Un punto y aparte
Antes de recoger la memoria
Curtida en la batalla de las derrotas

Un punto sin final feliz 

aapayés

Imágenes marchitas del recuerdo

Una noche vibrando tentaciones
Copiando argumentos
Con la mirada torcida en la poesía,
En los deseos mancos de amor
Mancos de besos y de caricias,
Manco de un gesto solidario

Una noche vibrando tentaciones
En un rincón aislado de la luna
Del sol y del viento acariciando la ventana

Se me perdió el bolígrafo
En el instante preciso de escribir tu nombre,
Perdí la memoria,
Imágenes marchitas del recuerdo
Muy bien guardado
En la bolsa de mi silencio,
Quise gritar tus besos
Y solo me brotaron lagrimas,
Y una espina olvidada en el pecho
Sangro luciérnagas
Que iluminaron el entorno de mis cabellos

Una noche vibrando a solas 
Como el resto del tiempo
Desde el momento que te dije adiós
Con la mirada perdida en tus ojos,
Lloré sin pronunciar tu nombre
Y me di la vuelta
Mirando al sol

Una noche queriendo sentir tus labios
Tus manos
Y tu voz mirando las estrellas,
Pintando tentaciones, que hoy
Quería sonreír, escribiendo poesía

Perdí el bolígrafo en el momento preciso
De escribir tu nombre

aapayés  

Perpetuo estigma de un poema

Un vaivén de ideas
Cabalgó la terquedad
Del escrito anónimo,
Mirando correr el río,
Silencio permanente
Perpetuo estigma de un poema

Levanto la voz
Y grito con los brazos caídos
La lluvia que comienza a mojar
La vida

Levanto la mirada
Y me regocijo pensando en ti,
Una hoja
Acarició mis ideas
Y recogí los versos vagabundos del paisaje
De la montaña

Levanté mis manos
Y mi voz se perdió
En la corriente armónica del río,
No vi tu presencia,
Pero sentí tu aroma bajo la luz del silencio

Levanto las palabras
Y dibujo la nostalgia sin reproches

aapayés

Dilucidar ausencias

Dilucidar ausencias
En los versos de un atardecer
De un amanecer sin nombre
Sin sueños, ni controversias
Es amedrentar el alma de un poeta

Me pierdo en las preguntas
De un día soleado
De un día nublado
Si no encuentro en la nieve
El frío que carcome la memoria

Un pensamiento aislado
Me doblega a seguir soñando
Llevo en las manos
El abecedario de un vagabundo
Que se amotina en el camino
Con la poesía vacía de un rompecabezas,
Rompo las tendencias de una enciclopedia
Vacía,
En la silla vacía
Del alma que la hace importante
Sentarse para comer
Para conversar
Para descansar el culo de un acontecimiento

Dilucidar las mendigas preguntas
De un amor verdadero
De un amor sincero
De un amor pordiosero,
Me llevaría siglos de palabras
Y de argumentos,
Para llegar a la conclusión de la locura,
Para no encontrar respuestas

Pero estas allí
Sin saber por qué,
Pero si, la razón de vivir
Soñando en el amor

Un atardecer vacío de contenido
En los días de invierno
En pleno suelo extranjero
Soledad y la melancolía son dos palabras
En una misma persona
Soledad, soledad, soledad

Dilucidar ausencias
En un rompecabezas de amor

aapayés

Con la frescura obscena de tus labios

Quiero parafrasear
El silencio escrito en tus ojos,
El que dictaste
Copeando la sonrisa amplia
Con el sueño profundo en versos,
La luna se escondió
Y apareció a tu lado
Dibujando siluetas al desnudo,
Quiero volar
Quiero vivir
Quiero dormir
Al lado cómplice de la luna

Quiero parafrasear tus besos
Con la frescura obscena de tus labios
Apretando los míos
Con tus dientes hambrientos de amor

Quiero amarte
Hasta el infinito
Con las tentaciones mas obscenas de tus piernas,
Quiero ser
El que te ame con las dificultades de la luna

Amarte

aapayés

Ritmo espiritual de tus besos

Escuchar las letanías de tu presencia
Con el suspiro eclesial de la luna
No deja de esclarecer
Los versos tiernos del universo,
Una mirada fugaz
Con el ir y venir del silencio,
Acústico manjar de tus piernas
Marchando al infinito placer del destino,
Escuchar los cabellos danzar
Al ritmo espiritual de tus besos,
De tus caricias,
Mordiendo el deseo bajo la luna
En la cama desnuda en ti

Oh marginal tentación la nuestra
Incógnita memoria,
Que trasciende al universo mundo del alma
De un beso antagónico
Con el sol en invierno,
Punto de congelación de un suspiro

Escuchar la voz del alma
El sonido de tus encantos,
De tus orgasmos,
En la piel enarbolando tentaciones,
Deseos de un poema bien escrito
De unos versos bien armados,
Concatenando la lucidez de tus labios
Con la lectura impecable de tus ojos,
Iluminando poesía

Escuchar tus labios
Tu lengua
Acariciar los versos de la vida

Oh marginal tentación
Enjutada en los deseos de tu cuerpo
Enlazado al laberinto del deseo

aapayés

Un ADN merodeando fronteras

Delirio espiritual de amar
Suicidio colectivo
Enquistado en los acontecimientos
De la vida,
Enarbolar los besos
Las caricias
Las tentaciones

Un deleite sin temor
Un ADN merodeando fronteras
Entre el corazón y el pensamiento

aapayés

Acariciando sueños

Una copa de vino
En un pajar de ideas
De imágenes
Curucuteando versos
Coqueteando sueños

Un cigarro encendido
Despilfarrando el humo,
En los acontecimientos ausentes,
En la habitación imaginaria,
De un grillo cantor
Sin que nadie lo escuche
Sin que nadie lo entone

Una copa de vino
Y un azar obligatorio,
Lanzando ideas en la mesa vacía,
Aleatorio verso
De quien los pinta,
En los labios olvidados
La metáfora mojada,  
En los ojos de quién los lee
Acariciando sueños

Una copa de vino
Y nada más
Y sin más que agregar
En los renglones olvidados
En las venas del silencio

En el sorbo espiritual de un beso

Una copa de vino
Abandonada en el recinto
De un amor prohibido

Una capa vinotinto
En la copa de un soñador
Escribiendo poesía
Bebiendo la copa

aapayés

Un toque de queda

El amor con los años acuestas
Tiempos vividos
Se va perdiendo
El libido menester del amor,
Deseo acariciando tentaciones,
El pensamiento
El intelecto femenino 
Enamora para siempre

Un  toque de queda
En los besos
Como en las caricias arrugando vida

aapayés

Lamiendo el placer del amor cumplido

Una rosa imaginaria
Me robó la sonrisa
Roja,
Como los labios de tus besos,
Me conquistó la imagen
De la espina enquistada en mis dedos,
Un beso
Un rasguño
Soltó la caricia que tanto esperaba

Una rosa que no vi llegar,
Siempre estuvo allí
En el jardín de los deseos,
En el jardín  de sueños,
Una cama desordenada
Y ajada de tanto fragor,
Una rosa en la cama
Rasguñando las tentaciones del placer compartido

Una rosa de amor
Poesía de un amanecer inolvidable
Escribiendo poesía
En el cuerpo de tus secretos
Del amante anonadado por tus espinas

Una rosa de tus labios
Lamiendo el placer del amor cumplido

aapayés

Entre las piernas de mis deseos

En un rincón de mi pensamiento
Habita el diminuto té
Que bebí
Cuando el amor, inmenso por ti
Me rebosaba el pecho
De alegría,
Tan diminuto era
Que se quedó en un verso partido
Entre las piernas de mis deseos
Y en el ombligo de mis sentimientos

No he vuelto a beber tu aroma
El elixir de tus piernas
Se quedó acariciando tu presencia,
Y el beso
Desactivado
Se quedó congelado en el olvido,
Mis manos se emancipan
Y escriben versos
Disparando al universo
El oxigeno necesario por vivir,
No hay dudas
De que el té
Se quedó en el paladar del deseo

En ese rincón del cielo
Estaré
Estarás
Esperando la alegoría de un beso
Merodeando tus piernas,
Arrullando el aroma del té de mis deseos

Entre las piernas de mis deseos
Me bebo el té de tu lívido
Cuerpo enarbolando tentaciones

aapayés 

Las tentaciones de un amor platónico

Que callada soledad
Me ha tocado vivir,
Ausente de toda falsedad
De toda inquietud imaginaria,
De un tesoro aislado
En los andamios del corazón,
El alma disuasoria de un verso
Agobiando sonrisas

Que callada soledad
Oculta los sentimientos,
La locura se vuelve coherencia
Sin remedios, ni soluciones
A los acontecimientos
Que un día quisimos borrar,
Me abriga
Me envuelve con cariño
Y con el anhelo de seguir viviendo
Arropa los deseos de sonrojarle al tiempo,
Una diminuta manera de plasmar
El amor en carne propia,
En un abrir y cerrar de manos
Aparecen por el suelo,
Los besos
Las caricias
Las tentaciones de un amor platónico
De un amor cómplice de todo

Que callada imaginación
Envuelve la poesía,
En la soledad cierta del devenir
Copiando los secretos  enquistados
En los atardeceres de un verano,
De la primavera recién parida
Del invierno recién dormido
De un beso recién congelado
De una caricia recién derretida,
Se mezcla con el agua
Que acaricia mi cuerpo
Bajo la lluvia torrencial del olvido,

Que callada tentación
Arrodilla
Los ojos
Mirando la belleza indómita de la noche,
Del amanecer
Vitoreando soledades,
Soledad marginal
De un acontecer sin precedente
En los caminos podridos del olvido,
Del tiempo imaginario
En las grietas de un suspiro,
Leal al olvido
De un amor prohibido
De un amor ciego
Arrodillado al placer,
De un beso clandestino
En los labios de tus piernas
Con el libido mojando la lengua,
Humedeciendo el placer
Del pecado original de nuestros cuerpos

Que callada soledad
La que dibuja los gestos mas obscenos
En el movimiento rítmico,
Del placer con las manos apretando deseos
Presionando placeres

Que callada manera de vivir tu cuerpo
Humedeciendo la imaginación
De un placer cumplido,
En el cuarto escrito
En la celda de tus piernas

Que solitaria manera de vivir tu nombre
De sentir tu cuerpo
De llevar tu olvido

aapayés

Un amor en carne hecha poesía

La manera de hacernos eternos
Es amarnos toda una vida
Sin tapujos
Sin prejuicios
Sin condiciones
Con amor

Un amor en carne hecha poesía
Una vida

aapayés

En el paladar del silencio

Hay un trozo de mi
Olvidado en alguna parte
Del sendero,
Un paso
Marca el camino
Y el destino de a un no sé yo
Iremos de la mano,
De frente y mirándonos los pies
Un trozo de recuerdos
De algún poema mutilado
En los renglones de alguna nube
Enarbolando las tentaciones de escribir

Hay un trozo de mi
En los labios de tus sueños
En las manos de tus cabellos
En las caderas de tus deseos

Un trozo de amor
De placer sin sabor a mi,
Sin olor a ti
Sin pudor a plasmar el aroma de tu cuerpo
En el paladar del silencio
Y en la cama de una noche sin luna

Un trozo de mi
En los alrededores de tus pensamientos
De tus delirios

aapayés

Que manera de escribir poesía

Que curiosa manera de amar
Arrojar por la ventana
Los versos escritos,
Para que el viento lo lleve a su destino
Y no llegan
No los lees
No te enteras que nacen por ti
Amor
Ternura de un poema olvidado
En los acantilados del tiempo
Hemisferio anómala
De un amor imposible,
Llevas en tus labios
Los besos ajenos de un amante desconocido
De un verdugo del placer enamorado
De tu cuerpo
De tus besos
De tu cadera
Y de tu entrega inmaculada al placer
Al deseo
Al gesto libre y obsceno
De acariciar el sexo,
Y entregarlo todo sin pudor
Sin temor al coito desconocido

Que curiosa manera de amar
De entregarte
De darlo todo sin amor

Que curiosa manera de amar
En los tiempos virtuales,
Virtud genuina e incógnita forma del placer

Que manera de escribir poesía

aapayés

Me bebí el aroma de tu ausencia

Me bebí un cigarro en tu nombre
Y el humo
Se enquistó en las tentaciones de mis venas
Un grupo de células
Organizaron el ataque feroz
Contra el virus de humor
En mis entrañas,
Los poros parecían espinas
De un rosal raquítico de sentimientos

Me bebí el aroma de tu ausencia
Al calentar el café
Que nunca te bebiste conmigo,
Y con el tiempo
El abandono
Se seco, como el desierto de tus besos
No tenía canela
Ni azúcar
Ni leche,
Solo café, puro y añejo,
Con el olor inmaculado de la mañana,
La brisa, disipó tu ausencia
Y acarició mi memoria,
Con tu vestido bailando al compás del tiempo

Me bebí tu silencio
Y se enquistó en el alma
Del forastero anónimo.
Ya no recuerdo
Cuando palpite por última vez tu nombre
Bebiendo el café contigo por las mañanas

aapayés