Un siglo de pasiones

Un segundo recordando tu presencia
Demoledor deseo de sentir tus manos
Tus cabellos en desorden,
Y tu vestido, vuelo tentador por el camino
Me contagia
La tentación de tenerte en mis brazos
Y acariciar tus labios
Con el verso enamorado de mis manos,
Tu cuerpo inclinado en mis regazo
Y tus ojos leyendo mis deseos

Un momento
Un amor en reposo,
Un segundo
Un reloj sin destino
Sin el compás del corazón,
Sin el ritmo de tus piernas
Arropándote en mi pecho

Leo tus manos
Tu boca, susurra un beso,
Me apodero del amor,
Austera tentación
Si están coloreadas con la distancia,
Menester placer de escribir poesía

Un segundo en tus ojos
Una caricia de tus labios
Y en tu cuerpo un siglo de pasiones,
Escribiendo tentaciones
Bajo el cielo
Alucinando versos

Un segundo en mi pecho
Un siglo de ilusiones
Un verso ungido con tu nombre

aapayés

Lucubrando tentaciones

Mendigo soledades,
Inciertas pasiones, tiemblo
Me sumerjo y me desnudo al universo
Sentimiento obtuso de nacer, de ser
De pensar idolatrando tus pezones,
Desnudo tus cabellos a mis pasiones

Mendigo soledades,
Solitario y alcohólico
Me restriego en el purgatorio
Sentimiento de amar,
De amarte
De idolatrar tus pasos,
Camino al infierno del deseo,
De este amor
Que deambula por el precipicio de tu sueño,
Duermo

Mendigo y vierto el amor por el camino
Intento ser locamente yo,
Lucubrando tentaciones
En este bullicio de pasiones

Mendigo con la poesía,
Una copa de lluvia
En el cubículo de mi silencio
En el embrollo de mis sentimientos

aapayés

Sonriendole al desahogo espiritual del sexo

Me evoca la imagen de tus manos
Hilvanando versos
En los poros,
En la dicha de amar a la distancia,
En la discordia
Que engalana lo imperfecto,
Perfecto argumento para seguir labrando
Los versos elocuentes de un rompecabezas,
Salpica las tentaciones en tus caderas
En tu cuerpo,
Hemeroteca
Instalaciones de un te amo en crescendo, 
Armonía locuaz, en el abanico de la vida

Me evoca pronunciar tu nombre
En la estepa de un amor desnudo,
En el mar,
Desierto imaginario del verso congelado
En la nevera del silencio,
El sol
Derrite soledades,
Y el agua salada,
Vierte tempestad imaginara
A orillas de un poema,
Desbordando besos
En las inmediaciones de un te quiero,
A orillas de tus labios

Me evoca evaporar sonrisas
Y que el viento se las lleve a tu alcoba,
Cuerpo, desnudo
En la playa
De este amor sin sentido

Evoco
Como una oración en silencio
Acariciando tu presencia
Sonriéndole, al desahogo espiritual del sexo

Evoco y esbozo
Las caricias de un te quiero en desbandada
En los poros de tu cuerpo en el desierto

aapayés  

Aborigen deseo

Este aborigen deseo de amar
Caduca,
Con el sentimiento de vivir en paz
Bebiendo té, fumándote
En silencio
Mirándote
Cogiéndote

aapayés

Partículas mojando el tiempo

Y el humo de mi cuerpo
Se mezcle con las nubes
Y se vuelva eterno,
De partículas mojando el tiempo, 
Que trascienda al universo

Vuelo, y me esfumo
En el olvido con el viento

aapayés

Hilvanando soledades

Este espeluznante placer
De escribirte un verso,
Lapida la manera de sentir la vida
Una palabra
Hilvanando soledades
Terquedades ausentes 
Al ritmo imaginario en la poesía

Grito
Lloro
Y escribo
Los versos mas triste
En un poema sin sentido

aapayés

Un poema desnudo en la ventana

Tengo la ilusión de vivir lo imposible
De leer lo increíble
De sentir lo invisible,
Un colibrí lleno de colores,
Como el arcoíris imaginario
En un rompecabezas de escorpiones

Tengo la tentación idónea
Para colisionar la memoria
Con el presente y el pasado,
Olvido, subterráneo de un escrito en prosa
De un cuento en decadencia ilusoria,
De escribir lo vivido en dos tiempos,
El amor en tiempos de versos
Y el odio en tiempos de paz

Llevo la certeza doblada en el bolsillo
De escribir las historias prohibidas
Rompiendo
Con los estereotipos de un amor en desbandada,
Un poema desnudo en la ventana,
Y la luna versando tentaciones
Al verbo imaginario de sus labios

Un cuento ajado en el jardín
En una biblioteca arrodillada
A la fabula y leyenda de un cocodrilo desnudo
En la estepa infiel al viento,
Al sol acariciando ríos
Que bailan al ritmo de la luna
Contaminando el océano
Desierto de melancolía

Tengo en las manos
El realismo mágico de un cien pies
Sin calzado en la esfera del universo
Sin acariciar el suelo de la vida

Tengo en las manos
La tentación escrita de algo inexistente
En la bóveda espiritual
De un beso extraviado y vagabundo
En el tiempo y el espacio,
Que sin sentir las palabras
Acaricia todo

Realismo imaginario
En la magia de decir te amo
Suspirando en el laberinto de la vida,
Escribiendo sandeces
En el realismo mágico de las dificultades

aapayés

Terca manera de acariciar tus ojos, tus años

Me devoró la noche
El silencio acumulado en mi sueño,
Me devoró la nostalgia
Creyendo soñar despierto

Me devoró el día
Las palabras coloreando soledades
Argumentos ausentes en el castillo
De un amor en decadencia

Me devoró la nostalgia
Mirando el horizonte perdido
De la poesía hecha cenizas,
Congeladas tentaciones
En el frío eterno del olvido

Me devoró la noche
Calcando en el papel
El obsceno momento de vivir
Versando  el alma
Terca manera de acariciar tus ojos, tus años

Me devoró la nostalgia
La sonrisa perdida en tus cabellos
Versando poesía con el viento

aapayés

El gesto ajeno de un poema enamorado

Leo
Te leo
Y escribo sin pensar en el anonimato
En el cubículo literal del verso
Camino al recipiente abandonado de amor
De nostalgia
De tentaciones y lo hago mío
Lucubrar la idea de sentir
El gesto ajeno de un poema enamorado
De una carcajada arrugada por el tiempo
De escribir en tu cuerpo
El verbo ilusorio de pensar
De sentir

Leo
Te leo
Y corro al abismo imaginario
De un amor inalcanzable
De un sueño inagotable
De una mirada en el vacío

Leo
Te leo
Y nacen versos de amor por tu nombre
Un guiño ausente
Con una gota de lluvia en las mejillas
Lucubro el deseo
La agonía de vivir creyendo en la poesía
De ahogar besos
Versos danzando en el desierto
Que triste es vivir sin ti
Que alegría es saber de ti
Te leo
Y me sumerjo en el laberinto de tu cuerpo
Y lo voy conociendo
En este andar a ciegas
De la mano
Coqueteando tus labios
Y me desnudo
Con el aroma de la primavera
Y te veo
Leyendo versos con sentido
Sin sentido de leer poesía

Leo
Te leo
Y me sumerjo como una piedra en un río
Y me dejo llevar
Al océano existencial del mañana
Me moldea rozar
La profundidad rumbo al mar de mis tentaciones

Leo
Te leo
Y me pierdo
Al deletrear tus piensos

Leo
Te leo
Y me carcome la imagen de vivir sin ti

aapayés

Después de todo

Una llovizna de caricia al despertar
Bebiéndonos el amor,
Enlazados leyendo poesía

Después de todo
Tu y yo
Nos amamos
Bajo el sirimiri de tus cabellos
Y tus caricias humedeciendo el alma
Nuestros cuerpos desatando todo

Una llovizna de amor al infinito

aapayés

Metáfora de un amor en concierto

Y si el argumento de amar
Es obsoleto,
Y nos olvidamos de las palabras
Para concentrarnos en los hechos,
De una caricia en las manos
De un beso al despertar, al partir
Al dormir doblegados al silencio,
Vacío de contenido

Metáfora de un amor en concierto

Las palabras se mezclan con el viento
Y desparecen por completo
Sin dejar rastro en la memoria

Una mirada
Un caminar de la mano
Con las sonrisas enlazadas
Dibujando el sol

Que por dentro quema y nos da aliento
Y vida, para seguir soñando juntos

Y si olvidamos el argumento de soñar
Para escribir poesía
En la mirada de un amor solidario

Un verso en tus ojos
Y un beso en el alma de ser nosotros

aapayés

Con el pincel de un loco enamorado

Pinté tu cuerpo
Con los versos mas tiernos de la vida.
Dibujé tus labios
Calqué tu sonrisa,
E hice mío tus secretos
Un desnudo en la poesía,
Monocromo ideal de un artista en decadencia
Queriendo parir los colores de tu alma

Y yo pintando tu retrato
En este infierno de amor por tu presencia

Me desnudo y pinto tu ausencia
Con el pincel de un loco enamorado

Y yo aquí pintando tu retrato

aapayés

Torciendo el silencio opaco de la vida

Devorando la mañana
Con la luz de la vela acuestas
Torciendo el silencio opaco de la vida
Una carcajada de cenizas
De un cigarro recién compartido

Meriendo la melancolía
De ese amor en desbandada
En el horizonte ecléctico del purgatorio,
Armonía perdida
En el manicomio de la ternura,
Dulzura celestial
De un cigarro esfumando la vida,
De un ciego acariciando la vela en el silencio

Heme aquí bebiéndome el aliento
Leyendo tu alma,
Que ilumina la ceguera en el amor,
Que merienda tu silueta
Con la lectura implacable al deseo escrito
En el escritorio de tu despedida

Meriendo la luz del tiempo
Con la vela acariciando mi nostalgia

aapayés

Fango emocional del deseo

Volveremos a ser pecado
En el fango emocional del deseo

Ludópata tentación
Del gesto anacrónico de un beso 

aapayés

Ilustrando espasmos

Déjame ser la mano
Que dibuje tus deseos,
Tentaciones

Déjame pintar tu cuerpo
En la cama de mi poesía
A orillas de la paleta
Y frente al caballete de mis versos
Ilustrando espasmos
En el taller de mis caricias

Déjame ser la mano
Que esculpe tus gritos,
Enlazado al desnudo verso de mis gemidos
Y al mármol fino de tus labios

Déjame pintar y esculpir tu cuerpo
En las intimidades de nuestros sexos,
Aroma eyaculador
En el lienzo de nuestros labios

Déjame ser la mano que aliente
El amor de tu mirada
En el camino del destino

aapayés

Embozando el interminable espacio de la vida

Tengo la edad escrita en mis ojos
Del día aquel
Que juntos quisimos volar,
Embozando el interminable espacio de la vida,
Cuando apenas leíamos un verso
Acariciando nuestros pasos
En el camino de un amor verdadero

Tengo la edad
Para besar tus ojos
De la mano, mirando nuestras almas

Tengo la certeza
Que el tiempo nos hizo eternos
Acariciando tempestades
Abrazando soledades

aapayés

Soledad intensa de un momento sin retorno

Me regocijo de mis errores
El silencio de la noche
Soledad intensa de un momento sin retorno,
Inclino la memoria
Y desfilan, desnudos y obscenos
Los errores,
Los arropo y ajados en mis manos
Susurro
Y los hago añicos en mis pensamientos,
Los vilipendio
Y sin temor a equivocarme
Me regocijo al comprender, que los detesto

Arrugados en el olvido
Me acomodo en el silencio,
Medito,
Duermo
Y despierto mirando el día
Con la certeza de seguir viviendo

Me regocija saber
Que el tiempo cura las heridas, lo errores

Abrazo con el alma
El amanecer solitario, mendigo y fiel
A mis tentaciones y aspiraciones
De ser eternamente locuaz con mis derrotas
Para corregir el tiempo
Doblado en el verso
De un pájaro enamorado de la vida

aapayés

Encendiendo poesía

Ese fuego literal de tu cuerpo
Que arde en mi,
Desde el momento
Que encendimos la poesía de este amor
Incendiando los pasillos del deseo

Este fuego espiritual de amar
Encendida en el pecho de tus versos
Y en mis manos
Acariciando tus latidos
Encendiendo la poesía de mis tentaciones

Un beso encendido
Apagando el fuego de tus piernas

aapayés

Pedaleando los versos de tu cuerpo

Camino al olvido
Me llevé doblado en el pecho,
La poesía de tus besos
Con el reposo celestial de tu cuerpo,
En la cama de este amor
Que palpita por una caricia de tus versos

Camino al olvido
Comprendí,
Que la metáfora de tu cuerpo
Está escrita,
En el libro de mis recuerdos
En el rincón del silencio
Océano de un amor sin retorno

Metáfora de amor
Pedaleando los versos de tu cuerpo

aapayés

Pronunciando tu nombre en un pajar de ilusiones

Romper distancia
Y abrazar tus labios
Con la armonía literal de tu cuerpo, 
Tus manos entonando el deseo
Acariciando el viento en silencio
Con mis tentaciones gritando pasiones
A orillas del precipicio del placer cumplido

No me queda más que escribir tu nombre
Contar tus cabellos
Y desnudar a ciegas
El gesto puro y fiel a tus tentaciones,
Que palpita y pulula por las venas
De este amor inquebrantable a ti,
Doblegado a ti,
Inmerso en ti,
A ciegas,
Con la luna a tus pies
En la poesía de este amor,
Pronunciando tu nombre
En un pajar de emociones
En un pajar de ilusiones

No me queda más
Que acumular poesía en mis manos
Para enaltecer tu belleza
Lejana y cruel a mis tentaciones

Romper la distancia
A ti verbo inmaculado del amor

aapayés

Esperando la desnudes de tus besos

Me quedé
Esperando la desnudes de tus besos
Con el abrigo en tu escritorio,
Para escribir los versos mas tiernos de tu cuerpo
Los versos mas obscenos de tus labios
La empatía de un amor en decadencia
Desnudo y cruel
En el oído izquierdo de tus deseos

aapayés

En el parque de mi memoria

El tiempo cura las ausencias
De un amor en ruinas
De un amor en vitrina,
Cómo esperando el otoño
En el parque de la memoria

El tiempo sana las heridas
De un rompecabezas ensangrentado

aapayés

Por las sendas vacías de tus pasos

Me despedí sin beber 
Sin besar tu aroma
Sin acariciar tus besos
Con los ojos escudriñando tu ausencia,
De un anochecer tímido,
Pulcro silencio compartido
Idóneo deseo de salir corriendo,
Por las sendas vacías de tus pasos

Me despedí sin besar tu aroma
El día que juntos soñamos volar

aapayés