Anunciando el invierno coloquial de la vida

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Sentado aquí

Con el frío de otoño que me acompaña

Veo caer las hojas

Tiñe el suelo,

Las calles se visten de rojo

Amarillo y café del tiempo

Añejo otoñal

Anunciando el invierno coloquial de la vida

Soledad

Escribo

Y me sumerjo

Al silencio unisono

Del alma y el pensamiento,

Aunado al verso recíproco de amarnos

 

Escribo

Y nacen los colores del amor

De la vida 

Y del tiempo que juntos quisimos andar

Un hoja

El viento se la lleva

Y vierto en ella

La poesía de tus besos

Y de mis manos escribiendo tu nombre

 

Sentado aquí

Me sumerjo a ti

Verbo creador de vis, Mujer

aapayés

Memoria absoluta de un loco

 

 

 

 

 

 

 

Tengo tiempo

De no pintar mis delirios

Subordinado a ti

Enlazado a ti

Enloquecido por ti

 

Memoria absoluta de un loco

Congruente dilema

De quién merece amar,

Manicomio escribo

En el pecho izquierdo

De este amor enardecido,

Por la pasión de tu cuerpo

Por la tentación de tus besos,

Caricias concatenando todo,

En el umbral de la noche

En el amanecer de tu aliento

 

Tengo tiempo

De no sentir tu aroma 

De tus piernas abiertas a mis labios

 

Un beso

Una caricia

Y un verso susurrado 

El momento preciso de un espasmo,

Titubeando con tus ojos

La ironía del placer cumplido

Tengo tiempo

De no beber tus besos

Con la poesía de tus labios

En el rincón de tus versos

En el secreto de tus piernas

aapayés

En la hemeroteca de tus besos

 

 

Traje conmigo

La imagen de tu cuerpo,

Para colorear en poesía

Los escritos eróticos de tus ojos

De tu piel,

Manantial tentación

De mis manos

Esculpiendo poesía

Con tu imagen

Besando mis sentidos

Traje tus palabras

Para escribirlas

En el silencio ocaso de mi soledad

Tinta inspiradora del alma

Cuanta poesía

Nace de tu imagen

Presencia de un amor

Esperando versos

Sublimes del alma,

De un enamorado empedernido de tú nombre

Presencia

En el tiempo y espacio,

De una coma y un punto

En la hemeroteca de tus besos

Y caricias,

En el país de las maravillas

A colores 

En la noche

Fiel a tu reposo

 

Traje conmigo 

El recuerdo sublime de tus ojos,

Mirando mis labios

Leyendo tu poesía,

Versos

Danzando el tango de tu cuerpo,

En mis manos 

En plena noche extranjera 

 

aapayés

Contubernio celestial en la alcoba de tus piernas

 

 

 

 

 

 

Ese manuscrito en tu piel

Que alborotó mis caricias

Hojear con tentación inmaculada

Tu belleza,

Inspiró la sonrisa muda de tu cuerpo

Mis labios en mayúsculas

Copiaron

Uno a uno tus deseos

Sonrojado

Y encandilado a tenerte

Se esfumó la idea

De un amor inmaculado

Al pecado

Me dejé llevar

Y sin copiar tu nombre

Besé tus labios

Cual vino añejo

Saboreando tus deseos

Con el carmín en mis sentidos

De tus labios saboreando pasiones

 

Ese manuscrito en tu piel

Dictó el ritmo de mi cuerpo

Aferrado al tuyo 

Contubernio celestial en la alcoba de tus piernas

De mis manos

Palpando 

El erizo aroma de tus pechos

Y de tus labios

Libido manjar 

Del ir y venir en tu boca

Y en tu pubis 

Grito eyaculando poesía

Manjar escrito en tus ojos

Deleitando tentaciones

Mutuo esmero de sentirlo todo

 

Desnudos

Deletreando 

El manuscrito tatuado en nuestros cuerpos  

aapayés

Pestañas acariciando sueños

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Soslayar el amor

Con las temperaturas frías

Del tiempo

No implica la tentación de olvidarte,

Me sumerjo 

Con la poesía en mis dedos

Copiando gritos de amor

Por tu cuerpo

En la ventana 

Ante la lluvia de emociones

Soslayo las dificultades

Y las coloreo con tus labios

De un beso escondido en el corazón,

Vierto con los versos

Los poemas acariciando la esperanza

Y con las manos,

Las caricias  tiernas en un poema

Pestañas acariciando sueños

Nostalgia

Susurrando tentaciones

 

aapayás

Un poema en el escritorio de la noche

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Tengo la certeza

Que la poesía

Es el repertorio escrito del alma,

Sintetiza

El amor por la vida en un segundo

Espontaneo y frágil,

En el momento de sentir

La inspiración

En versos el amor

La vida

El tiempo

Empatía 

 

Siglos de versos perdidos

Navegando en el universo,

Desconocido poema

Parido en un segundo 

Espontaneo

Si logras atraparlo

Un poema en el escritorio de la noche

aapayés

Sin mencionar un beso en la mejilla

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Sollozo

El tiempo

Sin sol, sin voz

Ni el elocuente beso de tu despedida,

Me aferro

Me sumerjo

Y murmullo silente

Ante la adversidad del silencio

Sollozo

Silente

Mendigo

Y me dirijo a ti

Sin mencionar un beso en la mejilla,

Dilapido sueños

Y me enredo en la nostalgia

Coloreando versos

Sollozo

Silente

Escribo un poema

Y nacen muertos

Sin las comas

Ni los puntos suspensivos

Para seguir soñando tu presencia

Vuelvo

Vuelo y me pierdo en el cielo

Bajo el atardecer del Norte

Incógnito y solitario,

Me refugio en el frío de la noche

Para escribir

El poema más triste y en silencio

Para olvidar el beso mas rico de mi vida

Tus labios

Tu boca

Tu lengua

Me sabe a poesía inmaculada,

Esta noche

 

aapayés

Refugio tentación de tenerte

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Cuándo te veo

Siempre me quedo sin argumento

Mudo, anonadado de tu belleza

De tu intelecto y capacidad de ser

Mujer en todo el sentido del verbo

Del verso

Inalcanzable

Perfecta y sedienta en el amor,

En el conocimiento estricto a la lectura

En el argumento de vivir

De sentir

De ser,

Imperfecta en el amor, eres

Hermosa tentación en la lectura de tu cuerpo, eres

Te veo

Y solo nacen versos 

Sublime deseo elocuente de amarte,

Y me dejas mudo apreciándote 

Esculpo tu mirada

Dibujo tu cuerpo

Y coloreo 

Tu sabiduría espiritual de la vida 

Y pinto un poema en mi silencio

Refugio tentación de tenerte

Mujer

 

aapayés

Una mordida en el punto exquisito de tu cuerpo

Sentarse a ver la noche
Sentir los fresco eclesiástico del tiempo,
Me lleva a las catacumbas de un poema
Queriendo parir tentaciones
Queriendo colorear deseos
Y el placer espiritual de amar,
De amarte
De perderme en el horizonte de tu cuerpo
Y hacerlo brillar,
Luciendo con las caricias
La imagen de un atardecer caluroso
Y un anochecer contagioso,
De amar
De sentir
De versar
El sentimiento mas puro de un amor
Lleno de melancolía
A inmediaciones de tu cuerpo

Sentarse a ver la noche
Danzar la luna con tu silueta
Desnudar las estrellas con tus caricias,
Es sumergirse
En el abismo de tus caderas
En el deseo de nuestras piernas
Concatenando el angulo pasional
De un beso en tus pezones,
Una mordida en el punto exquisito de tu cuerpo

Sentarse a escribir
El grito espiritual de amarte a la distancia,
En las frías noches de otoño
Que apenas comienza en el norte,
Frío de un sentimiento congelado
En la nevera de las tentaciones

Escribir y versar tu nombre
En silencio
En las noches de exilio sin ti

Sentarse ante la noche
Y hacer del tiempo
Un momento suculento, pensándote

aapayés

Tu nombre acariciando el teclado de la noche

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Y hubo una sonrisa perdida

Una mirada arrugada de tristeza,

Ese amor por el beso ausente

Por el gesto lleno de ternura por el prójimo

Y hubo un amor por la vida

Marchando con la utopía en la mirada,

Al lado de las dificultades,

No me rindo

No me rindo ante nadie,

Y me llevo en el corazón

La sonrisa ancha de este amor verdadero

De este versos partido

Herido y fragmentado en poesía,

Ridículo sendero

Por el que juntos anduvimos 

Y hubo una sonrisa ausente

Como el sol en tiempos de lluvia

Y hubo un beso 

Hecho poema en el lunar de tu cuerpo

Y de tus labios acentuando tentaciones

Late en mis manos

Tu nombre acariciando el teclado de la noche,

Miro la soledad

Y sonrío con la mirada perdida,

Con la luz de la luna en mi pecho

Duermo

Y me regocijo recordándote

Cual melancolía enamorada de la vida

aapayés

Subterfugio imaginario en la poesía

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

La parafernalia idea de amarte

Es tan elocuente

Que la mentira unida a los deseos

De un amor consolidado,

En las cloacas de un sueño compartido 

Son versos

Refuto la idea de sentir

Los más íntimos deseos

En las escaleras

Del suplicio melancólico y obsceno,

Subterfugio redentor verso

En el poema en tus labios,

Abyecta tentación en el tiempo 

Crepúsculo sedentario en la vida

 

No me queda más 

Que entregarme a ti

Elocuente poesía 

En el día a día de un te amo

 

Que premio más honroso 

Vivir a tu lado,

Subterfugio imaginario en la poesía

 

aapayés