Un café contigo
Es un mañanero de sueños
Con la mirada en tus labios
Bebiendo a sorbos el deseo de tenerte
Acariciando mis pasiones
Con el cálido calor de tu boca,
Y la jugosa tentación de sentir
El pulso inequívoco a ti,
En las intimidades de mi existencia
Un mañanero café
Bajo el calor de tus ojos
Y el humo de tu cigarro
En la cama de la discordia,
Una caricia bien dibujada
Con el grito del silencio de tus poros
Y los espasmos de un amanecer de ensueños
Un café contigo
En las inmediaciones de un mañanero bien dado
aapayés